Este miércoles, se juntaron en la esquina de Oroño y Urquiza un grupo de personas que reclamaban seguridad en Pichincha. Entre ellas, Marcela, la hermana de un hombre que sufrió una descompensación cardíaca al socorrer a un vecino, a quien le robaron su camioneta en la zona. Allí, mostró su indignación al enterarse de que ya está en libertad: "Sabíamos que iba a pasar". Y agregó: "Un policía nos dijo que al día siguiente estaría libre".
El lunes, un delincuente robo un utilitario en Roca y Catamarca, fue perseguido por el propietario y ayudado por otros vecinos, quienes lo detuvieron en esa esquina de Oroño al 600.
Marcela, hermana del hombre de 63 años, que inició la persecución, contó que su familiar es un paciente cardíaco que empezó a sentirse mal en medio de la adrenalina y tuvo que ser asistido por una ambulancia: "Mi hermano está bien, está estable. Nos dijo la médica de terapia que le iban a hacer nuevos estudios".
A su vez, se refirió a la prohibición de acercamiento a la zona de Catamarca y España que le dictó la justicia al ladrón: "Es un chiste la resolución, el tipo tiene prohibido andar por esta zona, pero puede robar en cualquier lugar de la ciudad. Además, como si alguien fuera a controlarlo de que no circule por acá".
También habló Marcela sobre la decisión de su hermano de ayudar a la víctima del robo: "Se le había puesto en la cabeza que tenía que llegar al auto, pensó en sus hijos, en los míos, en cualquiera de su familia al que le hubiera pasado. Me dijo que lo volvería a hacer".
Este miércoles, se reunió con un grupo de personas del barrio para manifestarse contra la inseguridad: "Nos juntamos con gente de la vecinal Maradona para protestar en esta esquina y acá estamos haciendo el aguante. Vamos a tratar de hacer una convocatoria más grande para otro día", dijo.
"Estamos reclamando lo de siempre, más seguridad. Todos vivimos por acá y sufrimos arrebatos a diario y escuchamos a los ladrones arriba de los techos. No tenemos miedo", finalizó.