Cinco personas, entre ellas una presunta jefa narco de nacionalidad boliviana apodada “La Reina del Sur” con domicilio en el porteño Barrio 1-11-14 de Flores, irán a juicio oral acusados del delito de tráfico ilícito de estupefacientes, en el marco de una causa por el “narcobombardeo” de casi 300 kilos de cocaína desde una avioneta en un campo de Pergamino.
La principal acusada y supuesta jefa de la organización es Marisol Saavedra Chungara, de 54 años, quien quedó mencionada en las escuchas telefónicas con el apodo de “La Reina del Sur”. Para el fiscal federal Matias Di Lello, debe ser juzgada como “organizadora y financista de una cadena destinada al tráfico ilícito de sustancias estupefacientes”.
Los otros cuatro imputados son dos de sus hijos Juliana y Mauricio Justiniano Saavedra; Elves García de Olivera, de nacionalidad brasileña; y Denicio Zacarías Reyes, paraguayo.
La causa comenzó en agosto de 2021 y demandó el seguimiento durante varios meses de un grupo de personas oriundas de la villa 1-11-14 de Flores, que estaban sospechadas de vender y traficar estupefacientes que ingresaban desde Bolivia.
En concreto, un comisario inspector de la Delegación de Investigaciones del Tráfico de Drogas Ilícitas de Pergamino declaró que tenían la información de que había varias personas de la ciudad de Buenos Aires recorriendo la zona, buscando predios rurales propicios para poder recoger bultos con droga que serían arrojados en avionetas desde el aire, indicó el portal Fiscales.
Tras una serie de tareas de inteligencia y luego de analizar la información surgida de escuchas telefónicas, el 19 de enero de 2022 se montó un operativo en un campo ubicado en la localidad bonaerense de Rancagua, a 18 kilómetros de Pergamino. Allí se identificó el sector donde se haría la descarga de droga.
A las 4.50 de la madrugada se detectó a una camioneta Volkswagen Amarok blanca con cuatro hombres. Diez minutos después se observó a Saavedra Chungara con otras dos personas, otra mujer y un hombre, a la vera de la autopista Pergamino-Buenos Aires, en la intersección con la ruta N°32.
Una hora y media después, cerca de las 6.20, el personal policial observó a una avioneta que pasó unas cuatro veces sobre la zona y arrojó varios paquetes. De inmediato, se procedió a la detención de la citada Saavedra Chungara, y de sus hijos Juliana y Mauricio Justiniano Saavedra.
A su vez, en las inmediaciones del campo se detuvo al brasileño García de Olivera, quien habría quedado de custodia en la tranquera de ingreso del campo. Pero otros tres hombres que habían sido vistos en la camioneta Amarok se fugaron del lugar con el vehículo, que luego fue abandonado a dos kilómetros, con cuatro de los bultos arrojados desde la avioneta cargados en la caja.
Sobre el terreno se hallaron tres trozos de tela de cinco metros de largo por 50 centímetros de ancho, colores rosa y blanco, que serviría como referencia al piloto de la aeronave para marcar el sitio donde hacer la descarga. A su vez, a unos 300 metros del acceso a Rancagua se encontró otra camioneta, también Amarok, sin ocupantes. En su interior había una mochila y un certificado de Verificación Técnica Vehicular (VTV) a nombre de Zacarías Reyes.
Como resultado del procedimiento se secuestraron aproximadamente 130 kilogramos cocaína, distribuidos en cuatro bultos, cada uno de ellos con 30 paquetes confeccionados con bolsas de polipropileno en distintas capas y colores, y finalmente recubiertos de un film que presentaba la figura de un felino, sello identificatorio de carteles narcos.
Sin embargo, tres meses después y tras la denuncia de trabajadores rurales que avistaron paquetes similares, el 17 y 18 de abril de 2022, se realizaron allanamientos en una zona cercana al campo de Rancagua. Allí se encontraron más bultos, que contenían 96 y 64 kilos, respectivamente, de cocaína. El secuestro global de la droga fue de 289,114 kilos de clorhidrato de cocaína relacionados a los acusados. Otros 212 gramos de la misma droga fueron secuestrados en el domicilio particular de la ciudad de Buenos Aires de otro imputado ya identificado, pero aún prófugo.
“La Reina del Sur”
El fiscal explicó que “se registró a través de tareas de campo y registros telefónicos que Marisol Saavedra Chungara desde el inicio de la investigación fue armando una estructura operativa a la que coordinó y proporcionó medios -principalmente personas y vehículos- que posibilitaron el transporte y comercio de estupefacientes desbaratado”.
Según el requerimiento, esa imputada mantuvo diálogos a lo largo de los cuales se establece que “tenía un rol organizador de las actividades de las personas a la postre detenidas, siendo tan elocuente el despliegue que en una comunicación su interlocutor la llama ‘la Reina del Sur’ en obvia alusión al personaje de una novela de Arturo Pérez Reverte que encarna a una legendaria narcotraficante” y motivó también una exitosa serie televisiva en 2011.
A requerimiento del fiscal Matias Di Lello, el juez federal de San Nicolás, Carlos Villafuerte Ruzo, decretó el fin de la instrucción y elevó la causa a juicio. El debate aún no tiene fijada una fecha, pero estará a cargo del Tribunal Oral Federal N°3 de Rosario, integrado por los jueces Osvaldo Facciano, Eugenio Martínez y Mario Gambacorta.