La Administración Provincial de Impuestos (API) detectó más de 70 mil vehículos que, aún radicados en los Registros Automotor en el territorio provincial, habrían omitido su inscripción ante el impuesto Patente Única sobre Vehículos. La cifra representa más de 200 millones de pesos anuales en impuestos.
El organismo llegó a esta información tras cruzar datos electrónicos con diversas fuentes oficiales. Según precisaron fuentes del gobierno provincial, de un análisis preliminar surge que la maniobra común en dichos casos consistiría en que los propietarios -a veces a través de gestores- realizaban los trámites ante el Registro Automotor, pero omitían comunicar posteriormente al municipio o comuna de la respectiva localidad para que dicho vehículo sea dado de alta y pague la patente automotor. De esta forma evitaban abonar la patente automotor en la provincia de Santa Fe.
Los casos se detectaron en la mayoría de las localidades santafesinas. El conjunto de vehículos supera las 50 mil motos y los 20 mil automóviles o vehículos pesados, entre los cuales se incluyen autos y camionetas.
El impuesto de patente automotor que deberá tributar este conjunto de vehículos supera los 200 millones de pesos anuales. De ese total, 90% del impuesto corresponde a los municipios y comunas de la provincia, a lo que se suma la deuda por los años anteriores estimada en 500 millones de pesos.
La API pondrá a disposición de cada municipio y comuna la información sobre los vehículos detectados en situación irregular y que, según la información obtenida, se encuentren radicados en tales localidades. Con los datos disponibles, los municipios y comunas podrán intimar a los propietarios de dichos automotores para que regularicen la situación administrativa y abonen el tributo omitido.
Como resultado del mismo proceso, en el sentido recíproco, también se detectaron vehículos que ya no se encuentran radicados en el territorio provincial, cuyos nuevos propietarios habían omitido el trámite de baja del impuesto.
Este proceso, llevado a cabo por la API, es una medida articulada junto a otras que integran un plan sistemático de mejora en la eficacia y eficiencia de la administración tributaria. Por ejemplo, desde el mes de junio, las altas de vehículos cero kilómetro se deben informar mediante un proceso web con uso de clave fiscal, mejorando en calidad, volumen y tiempo la información disponible por la API y con menores exigencias burocráticas al contribuyente.
“Esta medida aporta en eficiencia pero fundamentalmente en justicia, especialmente con el ciudadano que cumple todos los días con sus obligaciones. Detectar a quienes pudieron no cumplirlas y aplicarles todas las consecuencias que la ley prevé es el camino que queremos marcar”, expresó el ministro de Economía, Gonzalo Saglione.
“La tarea que ha realizado la API ha implicado un gran avance en modernización, pero no en un sentido abstracto sino puesto al servicio de altos principios como la equidad y la igualdad ante la ley. Y todo ello hecho con recursos técnicos y humanos con alto compromiso del propio organismo”, agregó el secretario de Finanzas e Ingresos Públicos, Pablo Olivares.
Los efectos de estas medidas implementadas no solo implican mejoras en la administración de un tributo puntual como la patente automotor, sino también en las bases de datos de los padrones de vehículos por los cuales se tributa el impuesto.
Esto posibilitará mayores recursos para los municipios y comunas producto del alta al impuesto de los vehículos detectados, mayores recursos adicionales derivados de la cobranza de deuda de dicho impuesto por los años anteriores y cobranza para la cual los municipios y comunas se encuentran facultados por Ley Provincial N° 12.306.
La API distribuirá la información vinculada a los puntos anteriores en forma específica para cada municipio y comuna poniéndola a disposición de los mismos mediante los canales operativos de información digital de rutina.