Lo planificaron y hubo fiesta. Pero todo terminó mal. Un grupo de amigos preparó un fin de semana a pura farra en una quinta de Sáenz Peña, en el Chaco. Pero alguien filmó y el video de la fiesta sexual se viralizó. Desde entonces, llueven los pedidos de divorcio para los muchachos que protagonizaron el episodio.
En la grabación se puede ver al grupo de amigos junto a varias mujeres bailando en situaciones eróticas.
Una de las esposas que pidió el divorcio se encargó de difundirlo.“Anoche le envié el video a todos los chicos que tengo de contacto para que sepan que yo ya sabía lo que estaban haciendo”, se la escucha en un audio.
A partir de allí el escándalo fue mayúsculo. La mujer contó que le pidieron que no viralizara el video.
Pero no hizo caso y luego trascendió un audio de uno de los presentes en la fiesta. “El puterío que se está armando es increíble, se van a separar todos. Están por hacer un desastre”, dice.