Alemania-Portugal y España-Francia serán las semifinales de la Liga de Naciones, que se disputará en territorio germano entre el 4 y el 8 de junio, tras jugarse este domingo los partidos de vuelta de los cuartos de final.

La Mannschaft, que había ganado la ida por 2-1 a Italia, pasó de arrasar a sufrir en el Signal Iduna Park de Dortmund (3-3). Pareció sentenciar en el primer periodo con los tantos de Joshua Kimmich, de penalti, Jamal Musiala, en un terrible error de los jugadores italianos en un saque de esquina, y Tim Kleindienst, pero no fue así.

Reaccionó Italia tras el descanso. Moise Kean logró un penalti e incluso en la prolongación, con un penalti transformado por Giacomo Raspadori, llegó a empatar, pero no le dio para evitar que Alemania se clasificara por primera vez para una fase final de este torneo, logro que nunca había alcanzado en las tres ediciones disputadas.

Portugal, campeona de la primera edición, había caído en el Parken de Copenhague por 1-0, y en el José Alvalade de Lisboa estuvo al borde del nocaut ante una competitiva Dinamarca. Pero el técnico español Roberto Martínez recurrió a Francisco Trincao, inicialmente suplente, para, con un doblete suyo, forzar la prórroga y acabar obteniendo la clasificación con un triunfo por 5-2 tras un último gol de Gonçalo Ramos.

Los protagonistas de la otra semifinal se decidieron en los penales. España, defensora del título, y Países Bajos empataron 2-2 al acabar el encuentro, igual que en Róterdam, y 3-3 después del tiempo extra, y Francia le ganó por 2-0 a Croacia, el mismo resultado que sufrió en contra en Split y con el que se llegó a la definición desde los doce pasos. 

España se adelantó en tres ocasiones en Mestalla, con un doblete de Mikel Oyarzabal y una diana de Lamine Yamal ya en la prórroga, pero el conjunto de Ronald Koeman demostró personalidad y consiguió igualar las tres, por medio de Memphis Depay, Ian Maatsen y Xavi Simons, el primero y el tercero de penal.

Unai Simón, que había estado muy acertado durante el encuentro, fue clave la tanda de penales, al atajar el remate de Donyell Malen. Antes habían errado Noa Lang y Lamine Yamal y Pedri González materializó el definitivo 5-4.

Francia le devolvió a Croacia el 2-0 en Saint Denis con goles en el segundo tiempo de Michael Olise, con un precioso lanzamiento de falta, y de Osumane Dembele, y en otra dramática la tanda los fallos de Martin Baturina, de Franjo Ivanovic y de Josip Stanisic fueron letales para la selección balcánica y Francia obtuvo su boleto a la fase final también por 5-4.