En una jornada en la que los incendios en las islas volvieron a verse desde la costa de Rosario, un conjunto de organizaciones de Santa Fe, Entre Ríos y Buenos Aires advirtieron por “la débil institucionalidad ambiental de la región” y reclaman a las autoridades ambientales que “se adopten acciones de manera urgente y coordinada para abordar la problemática y su resolución”.
“El Delta en llamas”, se titula el documento de las agrupaciones verdes cuya difusión coincidió con la vista de humo en el humedal este sábado a la tarde desde el Parque España (ver foto de esta nota).
“Los incendios en el Delta del Paraná, con dimensiones de gran magnitud en jurisdicción entrerriana, dejan en evidencia la ausencia de un control de actividades antrópicas por parte de las autoridades competentes, la irresponsabilidad de quienes recurren al fuego para el desarrollo actividades y la débil institucionalidad ambiental para la gestión sostenible de la región”, señalaron las ONG en la nota enviada a las autoridades ambientales de las distintas jurisdicciones.
El envío se realizó al Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Nación y de Santa Fe, a la Secretaría de Ambiente de Entre Rios, al organismo responsable de ambiente de Buenos Aires, y también a autoridades encargadas del Plan Nacional de manejo del fuego.
“En un contexto de bajante extraordinaria del río Paraná, esta grave situación eleva hasta límites alarmantes la presión sobre los ecosistemas de humedales y pone en riesgo la salud y la vida de las poblaciones del Delta y de las ciudades ribereñas”, subrayaron en el documento firmado por más de treinta organizaciones, instituciones y personas vinculadas al Río Paraná y sus humedales, de las provincias de Santa Fe, Entre Ríos y Buenos Aires.
El informe incluye una historia de la problemática de los grandes incendios, asociada principalmente a la expansión ganadera en el Delta y que se repite desde hace casi veinte años.
Asimismo las organizaciones sientan una posición ante el anuncio oficial de “evaluar la propuesta de crear un área protegida en la zona de las islas del Delta, donde convivan las tareas productivas con parques nacionales”. Ideas que hace al menos 35 años esperan una definición oficial.
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