Hoy se conmemora un nuevo aniversario del asesinato de Sandra Cabrera. Hace 16 años, la dirigente gremial y trabajadora sexual recibió un disparo en la cabeza. No hay culpables por el hecho, ya que el único acusado fue liberado. Un acto se realizará esta tarde, a las 18, en la plaza que lleva su nombre en Córdoba 3650.
Sandra Cabrera era trabajadora sexual y secretaria general de la Asociación de Mujeres Meretrices (Ammar). El diario El Ciudadano recordó que la mujer recibió un disparo en la nuca en la zona de la Terminal de Ómnibus, el 27 de enero de 2004, en represalia por la lucha que llevaba adelante para combatir el flagelo policial hacia las mujeres que ejercían la prostitución. Había denunciado a la Policía por la complicidad en el crimen organizado y la explotación sexual de niñas y adolescentes. La habían amenazado con matarla a ella y a su hija Macarena, que en ese entonces, tenía 8 años. El único imputado en el homicidio fue Diego Víctor Parvluczyk, ex subjefe de Drogas de la Policía Federal en Rosario y el último vínculo amoroso de Sandra. Lo absolvieron por falta de pruebas y en 2007 quedó sobreseído a pensar de los testimonios de las trabajadoras sexuales que lo incriminaban.
Gabriela Hamela, secretaria adjunta de Ammar, anunció que en el nuevo aniversario del homicidio de Cabrera estarán presentes compañeras de Buenos Aires, sindicatos, organizaciones sociales y organismos de derechos humanos, entre otros actores. “Se va a proyectar el avance de un video con las voces más influyentes de la historia de Sandra y otras voces contemporáneas contando cómo ven el trabajo sexual”, explicó.
La referente de Ammar local detalló: “La idea es seguir trabajando de manera conjunta para saber cuáles son nuestros derechos y que nadie nos avasalle. La policía sigue hostigando a las trabajadoras sexuales. Sandra dejó su vida por la causa”.
“Esperamos a todos los que nos estuvieron apoyando estos años, a quienes bancaron la parada cuando Ammar se desarticuló en la ciudad, nos bancaron en las recorridas, los que estuvieron presentes defendiendo las fuentes de trabajo de nuestras compañeras, y a los centros de estudiantes que permitieron que nuestras voces sean escuchadas”, dice una parte del comunicado de la Delegación Ammar de Rosario.