El 54,7% de las empresas en Argentina identificaron como principal desafío invertir en seguridad y en garantizar la salud de los trabajadores, tanto en los rubros considerados esenciales como en los no esenciales, según un relevamiento realizado por una consultora privada de recursos humanos.
Los otros dos desafíos que lideran el ranking de respuestas positivas de las compañías son mantener el negocio productivo (46,75%) y gestionar el teletrabajo (32,17%).
A su vez, consultadas por las medidas adoptadas por la situación de pandemia, el 55,04% de las 762 compañías con operación en Argentina mencionaron la implementación de teletrabajo; el 50% la reestructuración, incluyendo el trabajo a distancia, con el objetivo de mantener el negocio y el 23,51% la reducción de las jornadas laborales.
"Tomando en cuenta que la vuelta a las oficinas en muchas provincias se hace esperar y que muy probablemente se dé en un formato gradual y mixto, con días en la oficina y días en home office, crece en las organizaciones la preocupación por los efectos adversos del aislamiento en sus colaboradores", indicó una fuente de la consultora.
Agregó que el "estrés, la incertidumbre y la adaptación a la nueva normalidad que en mayor o menor medida sufrimos todos en estos meses requieren tanto la intervención y acompañamiento por parte de los empleadores, como la incorporación de rutinas y hábitos saludables por parte de los trabajadores".
El equipo de expertos de la consultora identificó 6 factores clave para un teletrabajo "saludable": establecer una rutina para separar el tiempo laboral del personal, que incluya pausas de desconexión para el almuerzo o la merienda, e incluso para salir a dar una vuelta a la manzana, de modo tal de evitar el sedentarismo extremo.
También remarcaron la importancia de tener un espacio delimitado para conectarse y trabajar desde la casa, con una mesa, silla e iluminación adecuadas; y de "desconectar" aún durante la jornada laboral, ya que "está comprobado que las reuniones virtuales generan más cansancio que las reuniones presenciales porque requieren mayor atención y mucho más cuando suceden en continuidad una detrás de la otra".
La conexión real es también un factor relevante, por lo que recomiendan estrategias de distracción para los trabajadores consistentes en caminatas o charlas telefónicas no relacionadas con el empleo.
Finalmente, recomiendan "cuidar las fuentes primarias de energía como la alimentación, el ejercicio y el descanso", y realizar juegos, deportes y actividades recreativas "para descomprimir" la tensión laboral.