Las llamadas sustancias químicas disruptoras endocrinas (EDC, en inglés) imitan, bloquean o interfieren con las hormonas de sistema endocrino del cuerpo contribuyendo a algunas enfermedades endocrinas como trastornos reproductivos, obesidad, cáncer y trastornos neuroendocrinos. Por su parte, los bifenilos policlorados (PCB, en inglés) estuvieron prohibidos durante décadas pero todavía persisten en el medio ambiente.
Bifenilos policlorados (PCB) y su impacto en la salud
Los PCB pueden encontrarse en suelos contaminados, sedimentos y algunos peces a raíz de la contaminación ambiental. Se vincularon a trastornos de ansiedad y trastornos reproductivos, entre otros, haciendo que las personas puedan ser más o menos vulnerables a los efectos disruptores endocrinos de la exposición a los PCB durante el período perinatal. Es decir, desde la concepción hasta un año después del parto.
Que un ser sea expuesto tan tempranamente a esta clase de sustancias químicas disruptoras endocrinas, puede provocar problemas de conducta en ratas. Así lo determinó este nuevo estudio realizado con animales por la Universidad de Texas en Austin (Estados Unidos), publicado en Journal of the Endocrine Society.
"Hemos descubierto que las ratas expuestas a PCB durante el período perinatal pueden sufrir cambios hormonales y de desarrollo", destacaron los investigadores. Y añadieron: "Nuestro estudio enfatiza y respalda investigaciones anteriores sobre cómo la exposición a PCB puede afectar resultados neuroconductuales".
Para arribar a estas conclusiones, desde el estudio se alimentó a aproximadamente 40 ratas preñadas con una mezcla de PCB relevante para humanos, o con el placebo. De esta forma, descubrieron que los EDC pueden reprogramar el sistema neuroendocrino en desarrollo de sus crías y provocar así problemas neuroconductuales en los primeros años de vida.
Para continuar explorando, se necesitan más investigaciones para dilucidar los mecanismos por los que los PCB provocan estos trastornos conductuales y fisiológicos.
Fuente: Infosalus.