“Nosotros decimos que el corazón es una bomba, la que, para contraerse y relajarse -tarea que realiza entre 60 y 100 veces por minuto- recurre a un mecanismo eléctrico, a unos cablecitos. Para decirlo científicamente, diremos que se trata de células especializadas que generan actividad eléctrica en el corazón y la conducen; de este modo activan el músculo cardíaco para que el mismo haga los movimientos de contracción y relajación, en cada latido cardíaco". El médico y especialista en arritmias, Luciano Citta, dialogó con Rosario3 sobre esta problemática.
A continuación, agregó: “La arritmia no es exclusiva de un rango etario determinado, la pueden sufrir desde bebés recién nacidos hasta ancianos. Hay arritmias benignas y malignas. Al latido normal del corazón lo llamamos ritmo sinusal, el que se realiza entre 60 y 100 veces por minuto. Pero, cuando existe una situación o se produce un 'cortocircuito' en este sistema eléctrico, se generan las arritmias, las que se dividen en dos grandes grupos: las bradicardias que son los ritmos cardíacos menores a 60 latidos por minuto y las taquicardias que superan los 100 latidos por minuto".
No todas las arritmias necesitan tratamientos. Pero cada arritmia debe ser individualizada, y una vez diagnosticada convenientemente, tienen su tratamiento.
"Cuando llega a nuestro consultorio una persona con arritmia, comenzamos por escuchar su historia, pasamos al examen físico, le hacemos un electrocardiograma. Inmediatamente, es fundamental, que ante este episodio de arritmia nos interioricemos por la estructura del corazón a la que accedemos mediante un ecocardiograma. El pronóstico de las arritmias está dado por la estructura del corazón; si tenemos un corazón debilitado, agrandado, con cicatrices, es muy probable que la arritmia en esa persona tenga un pronóstico adverso. Si la estructura de ese corazón está preservada el pronóstico de la arritmia será benigno", subrayó el profesional.
Otro recurso que utilizamos en el consultorio y que nos ayuda a definir el diagnóstico preciso y la eventual conducta a seguir, es el Holter que es un electrocardiograma de 24 horas.
FACTORES DE RIESGO
Son los mismos de todas las enfermedades cardiovasculares: obesidad, diabetes, hipertensión arterial, sobre peso, colesterol y los antecedentes de enfermedades cardiovasculares, como infartos, personas con enfermedad de Chagas. Se trata de factores de riesgo que aumentan la posibilidad que las personas padezcamos de arritmias. Con un corazón enfermo es más común ver pacientes con arritmias.
Cuándo aparecen las arritmias
Depende del tipo de arritmias, algunas son adrenérgico-dependientes, que se producen durante la actividad física. Otras arritmias aparecen durante el descanso nocturno. "Todo depende del mecanismo desencadenante de la arritmia", destacó Citta.
Qué es y cuándo recurrir a una ablación por radiofrecuencia
"Frente a algunas arritmias, la primera alternativa son los remedios, pero cuando la arritmia es refractaria a los tratamientos, proponemos otros caminos", resaltó.
Y agregó: "Uno de ellos es la ablación por radiofrecuencia que es el tratamiento de elección para curar las taquicardias. Se trata de un tratamiento invasivo por el cual introducimos catéteres por la zona inguinal hasta llegar al corazón donde desencadenamos la arritmia que está afectando al paciente, localizamos el circuito arrítmico. Con otro catéter aplicamos radiofrecuencia, con esta maniobra “quemamos esa pequeña zona” y eliminamos el foco ritmogénico. Es decir, curamos la arritmia".
Luego de esta maniobra, se deja descansar al paciente unas cinco horas y, luego de transcurridas, se puede levantar. "Nosotros lo dejamos internado para darle el alta a las 24 horas", concluyó el profesional.
* Luciano Citta, médico cardiólogo, especialista en arritmias, matrícula 14333. Instituto de Cardiología del Sanatorio Británico. Consultorios del Británico, Jujuy 1540, 5to piso, Rosario