La medicina actual, al contrario que pasaba hace unos años, ha dejado de dar la espalda a la tradicional, y, ahora investigan algunos de los tratamientos que se han aplicado durante años, sin una base científica estable, pero sí con resultados visibles. Y esto es lo que ha pasado con la Apiterapia, que no es otra cosa que utilizar el veneno de las abejas para sanar.
Tal como publica el portal revistabuenasalud.es, esta técnica milenaria, de la que ya se tiene presencia en la antigua china, se ponía en práctica para curar cientos de enfermedades de base nerviosa, respiratoria o de la epidermis, contaba con grandes adeptos tanto a la hora de aplicarla como en el momento de recibirla, pero, con los nuevos tratamientos se fue dejando de lado.
Por el relanzamiento de las terapias alternativas, y la gran acogida que tiene por parte de los pacientes, se están investigando y volviendo a aplicar las antiguas técnicas de curación. Y una de ellas, es la acupuntura con abejas, o como se conoce técnicamente, la apiterapia.
Muchos expertos sostienen que en realidad esta técnica es la base de la acupuntura, ya que, es un avance bastante probable, que los médicos orientales, tras probar la efectividad de los aguijones de las abejas, buscarán algún tipo de sustituto que ofreciera una efectividad parecida, y así se podría haber llegado a las actuales agujas de la Acupuntura.
La apiterapia pone de manifiesto que el veneno de las abejas es muy efectivo para mejorar ciertas patologías que afectan a las personas, y, que tras estar expuestas, siempre de una forma controlada, al veneno de estos insectos, tienen notables mejoras.
Fuente: revistabuenasalud.es