Es un derecho pleno el tener acceso a la salud. Naciones Unidas hace foco en la atención universal en ese aspecto, y en Santa Fe desde hace un tiempo hemos logrado contar con una salud pública y una salud privada de excelencia. No en todas partes ocurre lo mismo, pero esta circunstancia debería representar para nosotros un compromiso para seguir trabajando y corregir esas desigualdades. El derecho a la salud no sólo debe ser universal sino que deben derribarse las barreras que muchas veces obstaculizan la accesibilidad.
- Doctora Ángela Prigione, ¿qué representa para el Colegio de Médicos, el impacto de la crisis sobre la atención de la salud?
- Velamos para que podamos ejercer la medicina en las mejores condiciones. En un país con una situación económica difícil no existe profesión que pueda florecer. En cuanto a la salud es de esperar que podamos salir de estas crisis que afectan lo laboral, lo social y lo económico y por lo tanto la salud de los individuos cuyo sistema inmune está expuesto. Los mencionados son factores adversos que repercuten en la salud personal, primero y luego, en ese individuo, integrante de la comunidad. Una sociedad que progresa ofrece mejores condiciones laborales para todos, y también para los trabajadores de la salud; en la calidad de esos trabajos y en su propia seguridad para ejercerlos en los sistemas de atención de urgencias y en las guardias médicas.
- Doctor Miguel Ángel Cappiello ¿qué representa para el Estado provincial, la atención de la salud desde el Estado en tiempos de crisis?
- Hoy el lema en el mundo es cobertura sanitaria universal, un objetivo que está muy lejos de alcanzarse, ya que hay muchas personas que no tienen acceso a la salud. Y esta es una deuda que los países que integran Naciones Unidas tendrán que saldar y que afecta a los ciudadanos del mundo.
Cuando en el país teníamos Ministerio de Salud, y el ministro era el doctor Lemus, el Presidente de la Nación puso a consideración de los argentinos la CUS (Cobertura Universal de Salud) para los argentinos. Hoy no tenemos Ministerio de Salud y la cobertura quedó como una promesa vacía. Hay faltantes de vacunas, faltan medicamentos de alto costo y prótesis. En nuestra provincia se evidencian algunas dificultades por el momento económico que vivimos, pero son sustancialmente menores que los que sufren los argentinos de otras jurisdicciones.
Todos los que desde la dirigencia estamos involucrados con la salud pública tenemos una deuda con los ciudadanos, cumpliendo la parte que nos toca: cubrir con las necesidades de atención de la salud para toda la población. A pesar de todo lo que ofrecemos, que no alcanza para responder a la demanda de salud de los ciudadanos que constituyen un derecho prioritario.
- ¿Qué se ha hecho al respecto en Rosario?
En la época en que Hermes Binner era secretario de Salud Municipal, e inició el gran cambio hacia una salud accesible a la población, María del Carmen Troncoso, una epidemióloga talentosa y dedicada, con reconocimiento en el país y en el extranjero, coordinó un trabajo que definía un mapa de la ciudad en el que se volcaban datos de cómo se enfermaba la población según sus condiciones socioeconómicas; si había o no agua potable y cloacas; cómo era su alimentación. Hoy estamos en una situación demasiado crítica, ya que tenemos más pobres y mayor índice de indigencia y pérdida de fuentes laborales; con lo cual la gente con mayores necesidades recurre al sector público. El secretario de salud municipal nos decía que en poco tiempo aumentaron alrededor de 40.000 historias clínicas.
Esta situación se da en un país que ha tenido sanitaristas de la envergadura de Ramón Carrillo, como Domingo Cabred, como Arturo Oñativia; nosotros que no nos queremos poner a esa altura, hemos hecho y estamos haciendo esfuerzos para dar la respuesta correspondiente a la demanda en salud de los ciudadanos; se ha trabajado mucho en el tendido de cloacas y la provisión de agua potable; hace poco la provincia inauguró el acueducto del Norte para proveer agua potable al norte santafesino que hasta hace poco carecían de ella. Trabajamos para hacer frente a la epidemia de dengue. Esta situación crítica por la que estamos atravesando demanda de la dirigencia, dedicación, estudio y talento para que la salud pública del país vuelva a tener la posibilidad de dar respuesta a los ciudadanos que reclaman por su derecho a la atención de su salud. Santa Fe y Rosario, por la estrategia empleada hace años, disponen de de dos laboratorios que proveen medicamentos.
- ¿Cómo describiría la situación actual?
La situación es compleja y preocupante lo que nos dificulta, en el país llegar a lo que pide ONU, Cobertura Universal de Salud para todos los argentinos. E insistir con las campañas públicas de prevención; actividad física, alimentación saludable, no a las drogas y a las adicciones con aceptación social como el tabaquismo y el consumo de alcohol. Es responsabilidad del Estado en los tres niveles que los ciudadanos puedan tener información y acceso a la atención de la salud. El derecho es para todos.