El presidente Javier Milei dijo que si hay salarios de "miseria" es consecuencia de las políticas implementadas por gobiernos anteriores y no por las de su getsión.
“Hoy los salarios son miserables no por culpa nuestra, los salarios son miserables como consecuencia de 20 años de populismo”, aseguró el jefe del Estado en una entrevista concedida al periodista Kevin Simauchi de Bllomberg en Casa Rosada.
Milei se mostró esperanzado en que los ingresos comiencen a recuperarse a partir de un descenso brusco de la inflación y del levantamiento de los controles de capitales. Pero aclaró que todavía falta un largo camino.
“Primero tengo que sanear el Banco Central y es importante entender esto: cuando usted tiene el Banco Central quebrado, los pasivos monetarios superan a los activos y eso se corrige con un nivel de precios más alto para licuar los pasivos monetarios; cuánto más quebrado está, más alto es el nivel de precios”, dijo.
Milei sorprendió en la entrevista al señalar que no pudo llevar a cabo su programa original de dolarización por temor a un juicio político.
“Nosotros teníamos una estrategia para dolarizar que era tomar los activos del Banco Central contra el gobierno nacional, esos títulos pasarlos a mercado y hacernos de dólares... Y la realidad es que hubiera funcionado a la perfección porque cuando nosotros llegamos los títulos argentinos estaban en 18 dólares y hoy están en torno a los 54. Hubiera sido una gestión muy exitosa, pero dada la construcción del sistema político argentino, lo intelectualmente deshonestos que son los políticos, es muy probable que si yo hubiera hecho esa operación a precio de mercados, la política hubiera dicho que ahí hubo una estafa, nos hubieran acusado de un negocio turbio y nos hubieran mandado a la cárcel”, explicó.
En ese contexto, el jefe de Estado dijo que decidió apelar a un fuerte ajuste fiscal “sin precedentes en la historia de la humanidad” para sanear las cuentas públicas e ir desmantelando lentamente los controles que pesan sobre el movimiento de capitales.
Milei dijo que “no tiene ningún sentido” aplicar una nueva devaluación. “Eso lo dicen algunos economistas locales y están equivocados; ¿por qué yo tengo que hacer saltar el tipo de cambio hoy si el tipo de cambio libre paralelo coincide con el oficial? ¿Qué tipo de estupidez es esa que tengo que hacer saltar el tipo de cambio cuando está alineado con el de mercado? Deberían ser más respetuosos de las
En cuanto a los aumentos de tarifas, el presidente informó que el país ingresó en un sendero de recalibración de tarifas de servicios públicos y transporte que aún no se ha agotado, sino todo lo contrario: recién ha comenzado. El proceso completo demandará al menos tres años, precisó.
“Cuando usted hace la recalibración de tarifas, usted puede hacer todo de corto o lo puede repartir en el tiempo. Si nosotros lo hacemos torpemente como recomiendan algunos todo adelante, el problema es que eso lo va a frenar la Corte Suprema de Justicia. Eso ya se lo hizo al gobierno de Macri. Entonces lo que nosotros hicimos fue incorporar como restricción el fallo de la Corte Suprema de Justicia, entonces nosotros terminamos recomponiendo la ecuación financiera del contrato en tres años. Por eso hay subas en las tarifas que tienen distintos componentes y entre esos componentes está incluido el salario porque cuando la Argentina pegue la vuelta y suban los salarios, usted va a poder recomponer las tarifas mucho más fácilmente”, desarrolló.
“Lo vamos a hacer de un modo que la Corte Suprema no lo frene, esto es hacerlo entres años”, completó.
El jefe de Estado planteó que su continuidad en el poder a partir de 2027 dependerá del resultado de su plan de Gobierno.
“Eso depende de si los resultados son favorables. O sea, en la medida que los resultados nos acompañen, va a haber posibilidad de hacer algo así. Y si no, será la decisión de la gente eso. Esta es la decisión de la gente. Si hoy hubiera un balotaje, ganaríamos 58 a 42., O sea, hoy ganaríamos por 16 puntos. Le voy a decir más: si se piensa en primera vuelta, sacaríamos 48 puntos. Eso nos alcanzaría para ganar en primera vuelta, porque quien mejor está posicionado tiene 20% de intención de votos. Pero no solo eso. Eso no quiere decir que los diez puntos restantes no los pudiéramos conseguir. Una parte supongo que consigue la mitad a pesar de estar haciendo el ajuste fiscal y el ajuste monetario más grande de la historia de la humanidad. Nosotros hoy estaríamos en condiciones de ganar en primera vuelta con el 53 por ciento. ¿Por qué voy a cambiar? ¿Por qué voy a cambiar?”, cerró.