En otro capítulo del enfrentamiento entre el kirchnerismo duro y Alberto Fernández, Máximo Kirchner presentó un proyecto en la Cámara de Diputados para que se adelanten los aumentos pautados por el Consejo del Salario. La iniciativa es acompañada por legisladores de la rama sindical y representantes de los movimientos sociales. Lo que busca es que el incremento del 45% pautado en el mes de marzo por el Consejo del Salario se cobre en agosto y no en enero del 2023.
Entre los firmantes del proyecto se encuentran Vanesa Siley, Hugo Yasky, María Rosa Martinez, Sergio Palazzo, Claudia Ormachea, Carlos Ponce, Natalia Zaracho, Federico Fagioli, Veronica Caliva, Pablo Carro, Carlos Cisneros y Juan Carlos Alderete.
“Esta decisión permitirá que el 1 de julio de 2022 el Salario Mínimo Vital y Móvil alcance la suma de $47.850,00 (cuarenta y siete mil ochocientos cincuenta pesos) y supere efectivamente el índice inflacionario vigente y proyectada”, explican en el texto.
Y agrega: “Atento los incrementos efectuados del 18% en el mes de abril, y ante la contingencia que los montos del Salario Mínimo, Vital y Móvil y de la prestación por desempleo queden relegados frente al incremento de precios de bienes y servicios de consumo masivo, resulta necesario dictar medidas que garanticen el valor de los ingresos de las trabajadoras y trabajadores. Considerando que a fines de junio las trabajadoras y los trabajadores percibirán el aguinaldo y el gobierno nacional abonará la segunda cuota del refuerzo de ingresos, es que entendemos que debe adelantarse al mes de julio el aumento de las cuotas pautadas para los meses de agosto y diciembre a fin de hacer efectiva una política de mejora de ingresos”.
En otro pasaje del proyecto, los argumentos apuntan directamente contra la política inflacionaria en un sugestivo mensaje a Martín Guzmán, aunque sin nombrar en ningún momento al ministro de Economía: “Durante el 2022 la pérdida del poder adquisitivo por el aumento desmedido de precios evidencia la necesidad de adoptar medidas urgentes. Ya en el primer trimestre del año la inflación acumulada refleja un 16,1%. Si proyectamos que el ritmo del incremento de precios se mantiene a esta velocidad, para el mes de diciembre habría totalizado un porcentaje mayor al 60%, ampliamente superior al incremento del salario mínimo vital y móvil pautado que alcanzaría el 45% recién en el mes de diciembre”.
También pone especial foco en cómo los sueldos perdieron contra la escalada de precios: “En las últimas estadísticas salariales publicadas, de acuerdo al Índice de Salarios del INDEC, los salarios tanto del sector público como privado, registrado y no registrado, acumulan un incremento del 7,0% al mes de febrero frente a una inflación acumulada en el primer bimestre de 8,8%. A su vez, si observamos la inflación registrada en alimentos y bebidas del mes de febrero (7,5%) ya supera el acumulado de incremento salarial del primer bimestre”.
Otro de los puntos en los que impacataría la iniciativa, según explican los firmantes, es en los programas de ayuda estatal: “Teniendo presente, además, el impacto positivo que los aumentos en el salario mínimo, vital y móvil le proporcionan a programas como el Potenciar Trabajo –cuya cuantía inicial corresponde a un 50% del valor del salario mínimo vital y móvil, conforme la Resolución 121/2020 del Ministerio de Desarrollo Social–, así como también con las Becas Progresar que en virtud de lo dispuesto en el Decreto 84/14 se establece que pueden acceder al Programa aquellos jóvenes cuyo grupo familiar no supere los tres salarios mínimos, vitales y móviles”.
“Adelantar el aumento del mismo, es ampliar el universo de personas en condiciones de acceder al programa”, añade el texto.
Y completa: “Nuestro compromiso como espacio político es proteger el salario de las trabajadoras y los trabajadores, lo que implica que los mismos le ganen a la inflación y recomponer lo perdido durante la gestión macrista. Esta medida, si bien es insuficiente, apunta a dar cumplimiento a ello”.