Los titulares de un depósito y distribución de gas envasado salieron a dar su versión luego de la denuncia de una vecina de la zona norte de Rosario, a través de una abogada, indicando que se sentía “mucho olor a gas” por el supuesto fraccionamiento de garrafas. Desde el negocio destacaron que cuentan “con todas las habilitaciones municipales” y que “no se fraccionan garrafas porque eso está terminantemente prohibido”. Además, ofrecen “diálogo” o “una mediación con abogados” con los vecinos que iniciaron este reclamo.
Luciano, licenciado en seguridad e higiene laboral e hijo del iniciador del negocio hace más de 50 años en la zona de Génova al 2100, comentó a Rosario3 que “el problema es con una sola vecina” y que “viene de hace un año más o menos”. Y describió que “la planchada (depósito) está al lado de su terraza”.
“Tenemos un depósito de garrafas, cualquier aparato sometido a presión, emite olor gas. El olor está generado a propósito, para que las personas puedan detectarlo y evitar intoxicarse”, explicó.
Acerca de los controles que realiza la Municipalidad en el lugar, Luciano remarcó que “los inspectores nos empezaron a controlar, encontraron anomalías pero menores, como pedirnos mayor cantidad de matafuegos, pero nunca tuvimos un inconveniente mayor”.
Sobre el trabajo que se realiza en el depósito, describió que “a la mañana temprano viene un camión que nos trae las garrafas; la planchada está a la altura del camión. Subimos el stock a las camionetas y salimos a repartir”.
Y acerca del punto de conflicto, que motivó la denuncia de la vecina, dijo que “recargar gas está prohibido por la ley; en un momento hacíamos recarga de garrafitas, pero no lo hacemos más porque se prohibió”.
El integrante de la familia que está al frente del comercio expresó que acercaron “el acta de inspección a todos los vecinos, para que se queden tranquilos de que el negocio está habilitado”.
“Si yo llego a acumular más de 500 garrafas como dicen y las manipulamos, podemos volar todos por los aires, así que nosotros somos los principales interesados en tener todo en regla”, agregó.
Luego precisó que el mayor número de garrafas que pueden acumularse en la planchada “son 300”, que “como máximo estarán una hora en la planchada”.
También destacó que el depósito “es a cielo abierto”. Y añadió: “Si detectamos una garrafa que pierde, la subimos a la camioneta y la devolvemos”.
“Yo estoy dispuesto a charlar con esta vecina molesta. Estamos abiertos a charlar pacíficamente, a tener una mediación con abogados, porque no queremos seguir teniendo todo el tiempo en la cabeza este conflicto”, confió. Y cerró diciendo que “hay cuatro familias que viven de esto”.