Un determinado tipo de meditación utilizada para evitar pensamientos que distraen la mente puede ayudar a prevenir el agradamiento anormal del corazón, conocido como hipertrofia ventricular izquierda (HVI), capaz de duplicar el riesgo de infarto, provocar arritmia, derrame cerebral o incluso la muerte.
Así lo revela un estudio del Maharishi International University de Estados Unidos, publicado por la revista 'Ethnicity & Disease', y reproducido por El Espectador. Para eso, los investigadores seleccionaron a 85 personas con presión arterial alta, a los que se asignó aleatoriamente a un grupo de meditación trascendental (aquella que utiliza un mantra, palabra, sonido o frase que se repite para limpiar los pensamientos), mientras que otros quedaron como grupo de control.
Tras seis meses de estudio, las personas que participaron en el grupo control tenían un 10 por ciento más de agrandamiento del corazón, mientras que las que practicaron la técnica de meditación mantuvieron el tamaño basal del mismo y redujeron el estrés, lo que a su vez les prevenía que se agrandara el corazón.
Por tanto, a juicio de los investigadores, la técnica de meditación trascendental es un método "eficaz" no farmacológico para prevenir la hipertrofia cardiaca en las personas que padecen hipertensión y que tienen un riesgo especialmente alto de enfermedad cardiovascular.
Asimismo, el trabajo ha puesto de manifiesto que la meditación reduce el riesgo de mortalidad cardiovascular hasta en un 11 por ciento. "Al prevenir la progresión del HVI también se reduce la probabilidad de morbilidad y mortalidad cardiovascular asociada al mismo", concluyeron los investigadores.