Jorge Liotti es un agudo analista político del país y este año publicó su libro “Los dilemas de la democracia argentina”, que aparece en el medio del proceso electoral que culminará el 19 de noviembre con el balotaje entre los candidatos Sergio Massa (Unión por la Patria) y Javier Milei (La Libertad Avanza). El periodista y editor del diario La Nación habla de un fin de época donde “se va a configurar el tablero político” más allá del resultado en las urnas. Se pregunta aún “cuál es el verdadero Milei”, si es el de antes de los comicios generales o el que apareció tras el acuerdo con Mauricio Macri. Y cree que Massa podría ser más bien el candidato de cierta continuidad más allá de que se promocione como que el de hoy “no es su gobierno”.
A 40 años de la democracia en el país, Liotti ve un “riesgo de ruptura” entre la sociedad y la política en cuanto a la representación que surge producto de las elecciones. Y observa algunos síntomas como la irrupción del candidato libertario o los niveles de voto en blanco, ausentismo e impugnación.
A un mes de presentar su libro en Rosario, el analista charló mano a mano con Rosario3:
-¿Cuáles son los dilemas de la Argentina de cara al balotaje y en el marco de los 40 años de la democracia?
-El libro tiene mucho que ver con la coyuntura porque se terminó de escribir en julio y se publicó en agosto pasados, y explica el momento político del país que se está reflejando en este proceso electoral. Argentina viene acumulando una serie de problemas profundos y estructurales sin solución, y fundamentalmente el económico y es parte del déficit de los 40 años de democracia. También una crisis social que hizo eclosión en 2001 y que no se ha podido recuperar transformando la fisonomía de la sociedad. Y además con un bloqueo político producto de una puja y antagonismo entre kirchnerismo y macrismo que paralizó el sistema político en conjunto. Todo esto coincide con los 40 años de democracia y con este momento político. Y encuentra a una sociedad cansada y agotada que a su vez tiene que definir si estamos en un punto de inflexión: tratar de recuperarnos y volver a una senda virtuosa, o si estamos en un punto de no retorno donde debemos quedarnos atados al atraso y al fracaso. Todo está en juego y tiene confundida y angustiada a la sociedad, que ha votado diferente entre las provincias y la Nación, y ha votado diferente entre las elecciones primarias y generales.
-Si gana Massa, ¿es porque la sociedad quiere seguir igual o vamos a un cambio aunque más moderado?
-Todas las encuestas vienen pidiendo cambio desde hace un tiempo, no se quiere seguir cómo se estaba, es una impugnación general a todos los gobiernos incluido el actual. Y eso se vio reflejado en las PASO con la irrupción de Milei. Eso parece haber quedado congelado en la general con el triunfo de Massa. La pregunta es por qué la gente terminó votando más al candidato más continuista. Y allí ocurrió una mutación, desde un fervor por un cambio rupturista e incierto hacia una mirada más conservadora con miedo aferrada a lo que más conozco. Massa es el más continuista y con una estrategia de campaña instalando que el de hoy no es su gobierno. Está siendo exitoso vendiendo un producto a futuro. Es muy difícil visualizar un cambio estructural en Massa y más teniendo enfrente a Milei y con el apoyo de Bullrich.
-¿Milei representa un verdadero cambio teniendo en cuenta que ahora tiene el apoyo de Macri?
-Hay un efecto pos elección general, en algún punto inevitable. Milei llegó a su piso y techo. Y tenía que hacer algo distinto y terminó abrazándose con un sector de una coalición que recibió el rechazo de la población en agosto. El acuerdo con Macri es la realpolitik que impone comerse estos sapos y le pasa a los votantes de Milei y de Bullrich. ¿Milei es el del pos acuerdo, más edulcorado, moderado, que guardó la motosierra? ¿O mantiene sus banderas? Ese interrogante no se terminó de responder. La duda que sale de ésta pasteurización de Milei es si hay un nuevo Milei, más presidenciable sin sus atributos rupturistas; . no. Aún no podemos descifrarlo.
-¿Se pone en riesgo la democracia si gana Milei como dicen algunos de sus detractores?
-Hay un riesgo que el sistema democrático sea percibido por la sociedad como que no hay representación a partir de una elección. La gente no salió a la calle y se manifiesta dentro del sistema incluso votando un candidato que está en el extremo o no yendo a votar o haciéndolo en blanco o impugnando. Es imperativo que quien gane pueda reconstituir la representación de la mayoría de la sociedad, incluso a quienes no lo votaron, que su plan de gobierno sea acompañado por la dirigencia. Se trata de reconstruir una malla que se ha tensado y está cerca de la ruptura. La sociedad está dando una chance más y si no se cumple con las expectativas hay riesgo de una ruptura entre la sociedad y la política.
-¿Vamos hacia una nueva grieta, sea cual fuera el resultado?
-Más allá de quien gane, vamos a tener una reconfiguración del tablero político establecido en dos coaliciones. Si gana Milei, la reconfiguración será brusca y disruptiva. Veo un escenario más de grieta. Si gana Massa, habrá realineamiento interno del peronismo con nuevo líder y una enorme confusión en la oposición. No solo pienso en términos de grieta, el tablero ya está quebrado y se va a reconfigurar.