Enero suele ser un mes de mucho movimiento en el mercado inmobiliario rosarino. En la víspera del inicio del cursado universitario, son muchos los jóvenes que llegan a la ciudad a buscar alojamiento para los próximos años que se suman a quienes tienen que renovar el contrato o actualizar el monto que vienen pagando.
Desde la sanción de la ley de Alquileres, estas negociaciones tienen cierta regulación del Estado, que elaboró un Índice para Contratos de Locación (ICL). El mismo se calcula en base al Índice de Precios al Consumidor (inflación) y el salario promedio de los trabajadores estables.
Esa fórmula, que publica a diario el Banco Central de la República Argentina (BCRA), es la que se debe utilizar para aplicar la actualización anual de los contratos que están en vigencia. En tanto que para las renovaciones y los nuevos alquileres, la negociación queda librada a la libre regulación que se da entre la oferta y la demanda.
“Hay una bajísima disponibilidad de oferta. Rosario es una plaza de requerimiento universitario y en esta época del año se dan la mayoría de las renovaciones. Cuando suceden estas cosas nos damos cuenta lo necesario que es un cambio en la ley de alquileres, porque los ajustes anuales generan una gran incertidumbre a la hora de contratar y eso produce que los impactos sean muy determinantes”, sostuvo Alejandro Bassini del Colegio de Corredores Inmobiliarios (Cocir).
De acuerdo al ICL, en enero del 2023 la actualización del alquiler ronda el 82 por ciento. Mientras que las renovaciones y los nuevos contratos de alquiler cuestan entre un 50 y un 100 por ciento más, de acuerdo con reportes privados.
Desde Cocir atribuyen este salto abrupto de las renovaciones a que los contratos se realizan por tres años y, cuando se vence el plazo acordado “los alquileres quedan totalmente desfasados de acuerdo a los valores de plaza”.
Por su parte, desde el Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (Ceso), relevaron que durante el 2022 los alquileres aumentaron en promedio un 121 por ciento para monoambientes, 113% los de una habitación y 85% los de tres ambientes.
Alquileres promedio en el macro y microcentro de Rosario:
Monoambientes: entre $38.000 y $42.000
Departamento 1 dormitorio: $ 50.000
Departamento 2 dormitorio: de $ 60.000 a $ 80.000
Con estos datos, desde el Ceso advirtieron que el valor del alquiler de un monoambiente representa casi un 68 por ciento de un Salario Mínimo Vital y Móvil y un 83% para el caso de los jubilados de la mínima.
Además advirtieron que al gasto fijo para alquilar hay que sumarle las expensas que representan en promedio un 20 por ciento del valor del alquiler.
