El odontólogo dijo que "es cierto que, ante la circulación del virus y el sitio donde se ubican las patologías odontológicas, en plenas vías aéreas, hacen que se tomen por ambas partes todos los recaudos necesarios para hacer de la intervención que ese paciente requiera un acto seguro, tanto para él como para el profesional. Las recomendaciones elaboradas para poder atender estas emergencias, se hicieron teniendo en cuenta la bioseguridad y están basados en evidencias científicas que han demostrado su eficacia en el mundo. Hasta la fecha no hemos tenido casos de odontólogos reportados con infección por coronavirus en ejercicio de la profesión. Sí tenemos reportes de unos pocos odontólogos que han contraído la enfermedad, pero no ejerciendo su trabajo profesional".
Cada profesional junto a su paciente, programa las intervenciones, ajustándolas a las medidas de seguridad o las posponen de acuerdo al nivel de la urgencia. El criterio profesional, basado en las evidencias, permitirá al profesional y a su paciente actuar teniendo en cuenta la situación particular por la que el mundo está atravesando.
Todos debemos en estos momentos evitar la circulación como un modo para que el virus baje su RT. Los odontólogos contribuimos de esta manera y estamos abiertos a las urgencias; las que una vez evaluadas nos permiten tomar la decisión más adecuada para resolver los casos cuidando al paciente, cuidándonos nosotros y resguardando la salud pública.
Siempre recomendamos que ante la necesidad de consultar lo hagan en las páginas oficiales, tanto de los estamentos nacionales, como provinciales; y a fuentes científicas irreprochables, con tratamiento científico.
¿Cómo está funcionando el Colegio?
Como la nuestra está considerada una actividad esencial, atendemos en guardias especiales. Afectamos a la mitad de nuestro personal para atender entre las 10 y las 12 y 30 horas. Siempre con turno previo, salvo imponderables. No podemos dejar de atender las necesidades de nuestros matriculados.
Quiero destacar la conducta de nuestros colegas. Debemos agradecerles que hayan dado todo de sí para hacerse cargo de los elementos de bioseguridad imprescindibles que no han sido reconocidos por obras sociales y prepagas Destacar que nuestros profesionales dan prioridad a la bioseguridad, ante todo; respetando elementos de esterilización y uso de todos los materiales que garanticen la bioseguridad de ellos y de sus pacientes. Sabemos cómo preparar el consultorio, el que lleva los preparativos de un quirófano. Es el profesionalismo y su preparación lo que ha llevado a nuestros colegiados a sostener este momento tan crítico para la comunidad toda, contribuyendo desde su lugar.
Mientras nosotros como dirigentes, desde el Colegio seguimos insistiendo en que tanto las Obras Sociales como las prepagas deben hacer cargo de revisar los aranceles y de hacerlos efectivos en tiempos adecuados. La calidad de la prestación que se les brinda a los pacientes y los insumos necesarios para realizar una excelente prestación, hace necesario que sean reconocidos por los financiadores de la salud. Se trata de un servicio de salud al cual no se le deben limitar los recursos para la bioseguridad.
Hoy el ejercicio de la odontología está en la categoría de profesión de riesgo. En mayo de este año hemos presentado en la legislatura provincial un proyecto para tratar estos temas y todavía no nos han respondido.
*Raúl Allín, presidente del Colegio de Odontólogos de la provincia de Santa Fe 2da Circunscripción.
