Según datos de un informe elaborado por el Instituto de Investigaciones Económicas de la facultad de Ciencias Económicas y Estadística de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), la relación entre alquileres y salarios se mantuvo estable durante los últimos cinco años, tomando como referencia un sueldo promedio de Empleados de Comercio a septiembre de 2022 –unos 113 mil pesos– y sin contar costos de expensas y otros gastos. No obstante, a esta conclusión se contraponen otros números que indican que el valor de algunos alquileres aumentaron muy por arriba de las actualizaciones salariales.
Alejandro Bassini, coordinador del Departamento de Estadísticas del Colegio de Corredores Inmobiliarios (Cocir) que pidió el estudio, explicó este martes en Radiópolis (Radio 2) que arribaron a dicha conclusión luego de analizar “el valor de los alquileres respecto de la remuneración promedio de los trabajadores registrados del sector de Empleados de Comercio” para los meses de septiembre desde 2017 a 2022.
Esto representa, según detalló, un salario de bolsillo de unos 113 mil pesos, correspondiente a la categoría Maestranza del sector Comercio.
Sin embargo, reconoció como un problema que en la actualidad haya “apenas mil inmuebles” destinados a alquiler y un mercado con unas 60 mil propiedades a la venta. “Para mantener una normalidad necesitamos tener unos cinco mil en alquiler”, aclaró sobre una oferta que está muy lejos de satisfacer la demanda de propiedades en alquiler.
Para el caso de departamentos de un dormitorio, como se observa en uno de los gráficos que acompañan el informe, la proporción que representa el gasto de alquiler en los salarios del sector Comercio fluctúa entre el 20 y 25 por ciento en el período 2017-2022, registrando el valor más bajo en septiembre de 2019.
El informe también sostiene que el incremento del valor de los alquileres fue menor comparado con otros rubros, como Alimentos e Indumentaria, tanto en el último año como durante el período analizado de 2017 a 2022.
Si bien la suba anual de los valores está fijada por el Banco Central de la República Argentina a través del Índice de Contratos de Locación (ICL), luego de la sanción y puesta en funcionamiento de la Ley de Alquileres en julio de 2020, la normativa no regula los incrementos al momento de renovar o acordar nuevos contratos y sólo interviene en las actualizaciones dentro de los tres años de duración de cada vínculo.
Estos aumentos, que en los últimos 12 meses se sintieron con más fuerza por el contexto inflacionario del país, se vieron reflejados, por ejemplo, en una suba del 128,3% para un monoambiente en Rosario, según datos del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (Ceso) al mes de junio.
Para el caso de los departamentos de dos ambientes el aumento fue de 122,2% y de 141,7% en los de tres ambientes. En muchos casos, los salarios aumentaron por debajo de esas cifras.
Según el mismo relevamiento del Ceso, la mediana del precio de los monoambientes ofertados en Rosario es de $ 32.000. Los trabajadores que perciben el Salario Mínimo Vital y Móvil ($45.540) destinan el 70,3% de su ingreso al pago del alquiler de un monoambiente.
Mientras que para los jubilados que perciben el haber mínimo de $37.524, este porcentaje asciende al 85,3%.