Otra vez la agresión en el fútbol, pero en este caso en el femenino de la Liga Rosarina, entre adolescentes. Este fin de semana, una nena de 13 años del club Mitre de Pérez agredió a Abril, su rival de Social Lux. En las últimas horas, su mamá hizo su descargo en su cuenta de Instagram y la publicación se hizo viral. Luego, el club de la vecina ciudad emitió un comunicado aportando su versión de los hechos.
"Ella es mi hija Abril de los 6 años juega a la pelota en Social Lux y es pionera en el fútbol infantil femenino ya que fue una de las primeras en recibir el carnet de la rosarina", comenzó contando Analía. Y continuó: "Fue parte de un hecho de violencia y vandalismo por parte de una rival del club Mitre de Pérez. Después de hacerle una falta y ella en el piso, la jugadora Nro 4 de la Sub 16 le pisó la mano. Cuando Abril se iba a incorporar, le pegó una patada voladora en la panza".
En tanto, agregó que el árbitro fue partícipe del hecho de violencia y remarcó la falta de autoridad de ellos. "Abril quedó tirada llorando contenida por sus compañeras y profes. Nadie se acercó. El árbitro sólo echó a la jugadora de Mitre".
Rosario3 se comunicó con Analía, la mamá de Abril, quien agregó otros detalles de la situación: "Cuando mi hija se cae al piso, según me contaron otros padres, porque a mí se me nublaron algunas cosas, la nena de Mitre le pega una piña en la cabeza. Abril le pregunta «¿qué te pasa?» y ella le responde con una patada voladora debajo del vientre. El árbitro ni se mutó y no dijo nada. Se desmadró todo pero afortunadamente ningún papá ofendió a nadie ni se acercó a ninguna nena".
Lo que pide su mamá, desde su rol, es una estructura de psicólogos y sanciones a las chicas para que no vuelvan a suceder estas cosas en los partidos. "Exijo una sanción no solo a la niña. A ella se le pueden dar fechas sin jugar porque esa nena necesita atención. Pero también hay que darle una sanción a los representantes del club de Mitre de Pérez que no se hicieron cargo de lo que estaba pasando", dijo.
La responsabilidad de la Asociación Rosarina de Fútbol
"Hago como único responsable a la Asociación Rosarina de fútbol infantil. Es una lástima que estas cosas pasen en el femenino. Tuvimos que hacer mucho sacrificio para que haya competición y no está bueno la violencia. También hay que tener arbitraje como la gente para manejar la situación", remarcó Analía.
"Nosotros queremos que no haya violencia. Pasamos por varios obstáculos para llegar a donde llegó el femenino. Abril juega desde los seis y nunca le pasó esto. Nuestras chicas están criadas con valores", indicó la mujer.
Luego añadió que "la nena que agredió a mi hija, no puede estar dentro de una cancha. Su club tiene que contenerla y si no están capacitados, que no se presenten a jugar".
En conjunto con la Asociación, apuntó al arbitraje: "Si el árbitro vio o escuchó que dentro de la cancha entre las nenas se estaban insultando, o desde afuera algún padre (sin importar el club) estaba agrediendo verbalmente a las nenas sean o no sus hijas, debió tomar una decisión anticipada e ir advirtiendo que el partido en esas condiciones no iba a seguir. Es una categoría formativa y el árbitro debe cumplir ese rol".
"Tenemos que dejar de escuchar 'el fútbol es así' porque estamos fomentando una cultura deportiva violenta. El fútbol es un juego sobre todo en estas categorías, si los padres creen que el fútbol debe ser permisivo con la agresión que vayan a desarrollarse a otra disciplina", concluyó.
El descargo del Club Mitre de Pérez
El club Mitre de Pérez publicó un comunicado en su cuenta de Instagram contando su versión del hecho.
"Nuestras nenas soportaron las cataratas de insultos de los padres del otro equipo. Quieren que se crea que Mitre es un club de mala gente. Es muy fácil escuchar una sola versión del hecho. Nuestra jugadora va a ser severamente sancionada y estaremos a la guarda de la decisión de la Rosarina y el Tribunal Disciplinario. Fue una situación que nos sobre pasó y seguiremos trabajando para que esto no vuelva a suceder", indicó la institución de la ciudad vecina.
