Dove, la misma marca que hace diez años empezó a mostrar mujeres de distintas edades, razas, formas corporales y talles en sus avisos publicitarios, hoy lanzó una edición limitada de geles de ducha, con una serie de envases que remiten a distintas formas corporales femeninas.
El objetivo de esta campaña fue reforzar su filosofía y mostrar que “la belleza viene en distintas formas y variantes”. Sin embargo, tal como publica entremujeres, la repercusión fue en sentido contrario. Los más destacados apuntaron a que, al ducharse, no necesitaban tener presente cuál era su forma corporal; y que las mujeres no necesitamos que se nos categorice en todo momento.
En el blog Jezebel -una de las publicaciones online que propone una belleza sin “pulverizador”, como dice su slogan- dijeron que Dove se había quedado sin ideas.
Lo que dijeron los especialistas en publicidad
Las opiniones tuvieron sus matices. “Este es un cambio en el mensaje de la marca. De los avisos más realistas y serios, pasaron a una acción frívola y propia de un show televisivo”, declaró Samantha Skey, presidente de la compañía de medios digitales “She knows media”, al diario The Washington Post.
Mientras que el profesor de publicidad de la Universidad de Illinois Patrick Vargas fue, en la misma publicación, un poco más allá en su declaración: “Me parece una idea muy estúpida recordarles a los consumidores que sus formas corporales no encajan con la idea del cuerpo perfecto. ¡Nadie necesita tener en cuenta éstos en la ducha!” Y, agregó: “¿quién quiere un producto que tenga la misma forma corporal que uno?”.
Por parte de los expertos en análisis de consumo, sentenciaron que los compradores eligen los jabones y otros productos de tocador de acuerdo a un número inmenso de factores que incluyen las esencias, la calidad y el precio. Y, aunque el packaging ciertamente tiene un poder sobre cómo los posibles clientes reciben ese envase, no resulta determinante.
Sin embargo, no dejaron de lado las acciones positivas de la marca y que marcaron el rumbo para otras marcas líderes. “Dove hizo acciones muy buenas y realmente cambió el foco de la publicidad. Tomaron el riesgo de relacionar las marcas con un mensaje social y vieron cómo esas campañas impactaron en la autoestima de las mujeres y chicas”, reconoció Skey.