El Hummus -"garbanzo" en árabe-, la deliciosa crema de garbanzos cocidos, a la que se le añade jugo de limón, tahini y aceite de oliva, se convirtió en una de las preparaciones más sencillas y tradicionales de Oriente Medio y el Norte de África, proveniente del Antiguo Egipto.
Su preparación se popularizó en todo el planeta teniendo en cuenta que, además de su gran sabor, se trata de una opción muy nutritiva y saludable con un alto contenido de proteínas. Es por ello que, a nivel mundial, cada 13 de mayo se decidió celebrar el Día Internacional del Hummus.
Receta aggiornada
En este último tiempo, el hummus se convirtió en uno de los acompañamientos preferidos para utilizar en distintas recetas. A modo de innovación, distintas opciones comenzaron a sumarse para crear deliciosas y creativas versiones, sin dejar de proponer su costado nutritivo.
Tres deliciosas opciones:
-De palta
Mezclar en un bol 300 gramos de garbanzos, un diente de ajo, un limón exprimido, dos cucharadas de semillas de sésamo o tahini y media cucharada de comino molido. Procesar y añadir la palta (debido al aceite propio de la misma, no se necesitará agregar ningún otro). Rectificar sabor y regular el mismo con más limón y sal.
-De lentejas
Colocar en un recipiente 400 gramos de lentejas con medio diente de ajo (o media cucharadita de ajo en polvo), almendra picada, medio limón exprimido, comino molido, tahini y un chorro de aceite de oliva.
Triturar o procesar hasta que quede homogéneo. Agregar una pizca de sal y, con ayuda de agua, ir regulando su textura (más espesa o más líquida).
-De remolacha
Hervir las remolachas (una o dos, según el tamaño de las mismas y la cantidad de hummus que se desee). Dejar enfriar y pelar. Mezclar en un bol junto a 400 gramos de garbanzos cocidos, jugo de un limón exprimido, un diente de ajo, una cucharada de aceite de oliva, una pizca de sal y una cucharada de semillas de sésamo.