Es muy común escuchar algunos comentarios como: “Qué mala energía tiene esa persona”, “me voy de este lugar porque me siento mal” o “me mira y me duele la cabeza”. Según publica el sitio vix.com, es fundamental que te alejes de la llamada mala onda, para que no repercuta en tu vida diaria y en la convivencia con los demás.
Pero, ¿qué significan las malas energías? Como apuntan varias teorías, todo lo que existe está constituido por energía y como tal, se pone en movimiento a partir de las emociones. Como las personas suelen envidiar en mayor profundidad de la que aman, esas energías se trasforman en negativas.
Sin embargo, tené en cuenta que esas vibraciones no sólo pueden provenir del afuera, sino que también, pueden ser generadas por vos mismo. Es importante que, por ejemplo, tengas pensamientos positivos, los cuales te ayudarán a sacar el lado bueno de las cosas frente a determinadas situaciones, transformando la energía en positiva.
Otros de los factores que pueden favorecer la atracción de malas energías son los miedos y las inseguridades. Intentá identificar el origen de estas emociones y tratá de afrontarlas con seguridad.
Por otro lado, muchas personas sostienen que los trabajos de magia negra existen. De todas maneras, recordá que cualquier acción tiene sus efectos: todo lo que des, sea bueno o malo, regresará a vos.