Por dos violentas extorsiones ocurridas en agosto de 2017 en Rosario fue detenido el pasado martes un hombre de nacionalidad china que tenía pedido de captura internacional con alerta roja de Interpol. El arresto fue realizado por la Policía Federal en la oficina de Migraciones, en el centro de la ciudad, donde Jianhui L., de 31 años, fue a realizar un trámite.
Jianhui L. fue denunciado en China por intimidaciones cometidas hace seis años en Rosario. Las víctimas, y familiares, hicieron presentaciones en la Oficina de Seguridad Pública del municipio de Putian (provincia de Fujian) de aquel país, lo que motivó un pedido de detención y extradición.
Según fuentes de la investigación, el presunto miembro de la mafia china fue sorprendido por la División Unidad Operativa de la Policía Federal de Rosario cuando fue a renovar un “permiso precario” que tenía para permanecer en la ciudad. Al momento del operativo llevaba 55 mil pesos, dijo ser “estudiante” y agregó que no habla castellano.
El sospechoso fue trasladado a 9 de Julio al 200, donde está la delegación Rosario de la Policía Federal y este jueves se llevó a cabo la audiencia en los tribunales federales, donde se negó a ser extraditado. Ahora, desde el Juzgado Federal Nº 4, a cargo del juez Marcelo Bailaque, solicitó el formal pedido de extradición por parte de un juez de aquella jurisdicción.
El delito por el que cayó Jianhui L. ocurrió a comienzos de agosto de 2017, y se trata de diferentes hechos de privación ilegítima de la libertad y extorsión, según indicaron investigadores policiales. Como dato llamativo, después de esas intimidaciones fue arrestado junto a dos cómplices en la zona oeste de Rosario y fue condenado a la pena de 3 años de prisión de cumplimiento efectivo por tenencia y portación de arma de fuego.
Motivo de detención
Según el pedido de extradición formulado desde Putian, el 3 de agosto de 2017, Jianhui L. y un cómplice obligaron a una supermercadista china a subir a un auto en Paraguay al 2500, en barrio Abasto, y la mantuvieron retenida durante una hora, tiempo en el que la víctima fue maniatada y golpeada para que entregara dinero a cambio de “protección de la mafia china”.
El segundo hecho, de acuerdo al documento, fue tres días después, el 6 de agosto. Otra vez con un cómplice atacaron a una víctima –también de nacionalidad china–, que cedió y pagó 400.000 pesos.
Por esas extorsiones, Jianhui L. podría enfrentar una pena de hasta 10 años de prisión, de acuerdo a la legislación china.
La condena en Rosario
El 25 de diciembre de 2017, fue detenido por el Comando Radioeléctrico en un operativo realizado frente a un supermercado chino ubicado en Amenábar y Pueyrredón, en la zona oeste. El sospechoso estaba junto con otros dos hombres de la misma nacionalidad arriba de un Fiat Palio gris que tenía la patente de otro vehículo.
A los tres sospechosos, la Policía les secuestró un revólver calibre 38, una cuchilla tipo carnicero de 20 centímetros de hoja, tres pasamontañas, tres pares de guantes, dos antifaces, un destornillador, cinco precintos plásticos y dos celulares.
Por ese arresto, el fiscal de Rosario Fernando Dalmau los imputó por portación ilegítima de arma de fuego y adulteración de guarismo de la patente del auto. Posteriormente, los tres aceptaron ir a un juicio abreviado por el que recibieron una condena a tres años de prisión. Solo en el caso de Jianhui L. el cumplimiento de la pena fue efectivo, ya que se tuvo en cuenta que el revólver estaba debajo de su asiento al momento del procedimiento policial.
