Representantes de la comunidad LGTB fueron recibidos en el Vaticano y el papa Francisco no estuvo presente. Acudieron para presentar un informe sobre la criminalización de relaciones homosexuales en la región del Caribe.
El vocero del Vaticano, Alessandro Gisotti, confirmó en una nota que el segundo al mando, el cardenal Pietro Parolin, recibió en la Santa Sede a representantes de la organizaciones de lesbianas, gays, transexuales y bisexuales, quienes denunciaron la "criminalización" que padecen en todo el mundo y particularmente en el Caribe.
Según lo informado por el abogado argentino Leonardo Raznovich, del Instituto Interamericano de Derechos Humanos, el informe fue realizado por dicho organismo y será divulgado durante el 2020. Se denuncian "graves violaciones a los derechos humanos" en al menos diez países del Caribe, entre ellos Bélize y Jamaica.
"No fue un encuentro formal. Esta audiencia se genera por un interés del papa Francisco después de que se le pidió que interviniera. Quería entender más nuestro trabajo y la problemática de la criminalización en el Caribe y América Latina", explicó. "Este es el principio de un diálogo muy positivo y posiblemente se llegue en un futuro cercano a que la iglesia emita un comunicado importante", anticipó.
"Comenzó un diálogo con el Vaticano sobre ese tema y Parolin nos garantizó que continuará", comentó la parlamentaria inglesa Helena Ann Kennedy en declaraciones de prensa.
El secretario de Estado, les confirmó la posición de la Iglesia Católica "en defensa de la dignidad de toda persona humana y contra todo tipo de violencia".
Sin embargo, se desconoce el motivo de la ausencia de Francisco. "Pedimos que la Iglesia Católica, sobre todo aquella local, tenga una política única para este tema. Y el Papa está claramente contra la criminalización", aseguró Raznovich.
Recientemente, el sumo pontífice dijo que la Iglesia condena "toda discriminación y violencia por la orientación sexual". Aunque también ha "recomendado" a los padres que detectan "conductas homosexuales" en sus hijos, que acudan a una consulta psicológica o psiquiatra.