El maíz y una "tormenta perfecta" en la Zona Núcleo: la intención de siembra caería 30%

La precampaña muestra un fuertísimo contraste con el año pasado. No se venden insumos ni se concretan operaciones. ¿Cuáles son los principales factores negativos?

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La incertidumbre en la Zona Núcleo es realmente alta, pensando en la campaña maicera 2024/25. A tal punto, que muchos expertos se animan a catalogar como "tormenta perfecta" al referirse al escenario que afrontará el cereal. De hecho, a priori, la intención de siembra sufriría un derurmbe notable respecto al ciclo anterior, de acuerdo a las estimaciones de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).

"Lo que hay es mucha incertidumbre y decisiones que se postergan y que van respondiendo a la necesidad del día a día. Mientras tanto, los barbechos se están haciendo abiertos, o sea tanto para una posible siembra de soja o de maíz. Este contexto se resume en una intención de siembra maicera 2024/25 que cae en un 30% respecto del año pasado", indicaron los expertos de la BCR.

Es importante recordar que hace un año, el maíz era el cultivo que llevaba la bandera del progreso técnico y en el que más se invertía. Fue el cultivo que más creció en área, ya que se sembró un 30% más en la región. El cultivo tambien tuvo un rol muy importante como refugio de valor ante la incertidumbre del 2023. Incluso, ese año la precampaña maicera mostró una intensísima actividad desde su inicio. En cambio hoy, la precampaña del cereal en la región está en un letargo cuando falta muy poco para la siembra, apenas menos de un mes y medio.

La actividad comercial en la región núcleo está detenida y los productores postergan decisiones. “No se están vendiendo insumos ni haciendo operaciones. Está todo detenido, sin consultas. Se prevé una baja del 50% en el área de maíz respecto al año pasado”, dicen los expertos.

Factores negativos

Los técnicos regionales destacan dos factores que están influyendo en la toma de decisiones entre los productores de maíz.

El primero es el temor a la chicharrita, un insecto que ha generado fuertes daños y que limitará las posbilidades de hacer siembras tardías: el productor las ha descartado de plano. Cabe recordar que el año pasado se sembró un 35% como tardío y en el año anterior, el de la “3ra Niña”, la única forma de sembrarlo fue como tardío.

El segundo factor son los precios en cosecha, los márgenes actuales de este cultivo no son alentadores.

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