El futuro del rosarino Ángel Di María en el fútbol europeo todavía no se resolvió y en las últimas horas desde Barcelona, uno de los clubes que aparece como posible destino del ex Rosario Central, empezaron a dudar sobre su contratación debido a su edad, ya que la dirigencia del equipo catalán pretende un refuerzo más joven. En tanto, en Juventus se molestaron por su coqueteo con el Barca, pero siguen interesados y quieren definirlo cuanto antes.
En el medio de un año especial que culminará con el Mundial de Qatar 2022, que empezará en noviembre, los jugadores de la selección de Argentina que deben cambiar de equipo analizan con cautela los pasos a seguir porque quieren recalar en clubes competitivos donde, además, puedan ser titulares y sumar la mayor cantidad de minutos posibles para llegar en óptimas condiciones a la Copa del Mundo.
El caso de Fideo, que ya avisó que luego del Mundial le gustaría volver a la ciudad a mediados de 2023 para retirarse en Central, no es la excepción y por eso su futuro despierta tanta expectativa, tanto para él como para los intereses del técnico del seleccionado, Lionel Scaloni.
El extremo que quedó libre del PSG, tras siete años en París, priorizaría jugar en España y en ese contexto fue ofrecido al Barcelona. Sin embargo, la dirigencia encabezada por Joan Laporta puso reparos porque tiene 34 años y prefiere contratar a un futbolista de menos edad.
Por eso, la opción principal del equipo dirigido por Xavi Hernández sigue siendo el brasileño Raphinha del Leeds, que tiene 25 y más carrera por delante, según informó el medio Mundo Deportivo.
Bajo este panorama, Juventus, el equipo que primero había puesto los ojos en Angelito, le dio un ultimátum para que tome la decisión. Según el diario La Stampa, el cuadro de Turín le ofreció a Di María 5.5 millones de euros anuales mientras que el agente del futbolista tendría en mente 7.5 millones de la misma moneda para cerrar el trato.
El cuadro de la Serie mejoró la oferta a través de premios y bonificaciones, por lo que espera una pronta respuesta.
Mientras tanto, el Benfica de Portugal, donde Di María ya jugó entre 2007 y 2010, mira de reojo lo que sucede y figura como otros posible destino.