Jeffrey Katzenberg, el CEO de la productora audiovisual DreamWorks, manifestó su preocupación por el impacto que podría tener el avance de la Inteligencia Artificial (IA) en la industria cinematográfica y de contenidos para plataformas, que podría verse afectada por la eliminación de una cantidad significativa de empleos.
La declaración de Katzenberg tuvo impacto ya que se trata del director ejecutivo de uno de los estudios de animación más importantes del mundo, responsable de franquicias exitosas como Shrek, Madagascar, Kung Fu Panda y El Gato con Botas, entre otras.
Los empleos que podrían verse afectados en esta industria requieren de profesionales con distintas especializaciones, tales como artes visuales, física, Motion Graphics o rotoscopia.
Durante una entrevista con Bloomberg TV, Katzenberg reconoció que la IA podría provocar la desaparición del 90% de los empleos relacionados con la animación. "No conozco ninguna otra industria que resulte más afectada", agregó al respecto.
El directivo remarcó que la IA está cambiando profundamente la industria cinematográfica, y que en ese marco el rubro de la animación es el que notará más rápidamente este impacto.
"Si observamos cómo los medios se han visto afectados en los últimos 10 años por la introducción de la tecnología digital, lo que sucederá en la próxima década será diez veces mayor, literalmente. Creo que la inteligencia artificial, como herramienta creativa, tiene muchas oportunidades a su alrededor", añadió.
El director ejecutivo de DreamWorks mencionó que, actualmente, se requieren aproximadamente 500 artistas para terminar una sola película animada en un plazo de cinco años. A través de la inteligencia artificial, el tiempo y el personal necesario para una producción podrían reducirse considerablemente.
Más allá del panorama negativo, Katzenberg dijo que algunos puestos seguirán diendo necesarios, como por ejemplo aquellos que dependen enteramente de la creatividad individual.
La declaraciones de este importante ejecutivo del mundo del entretenimiento se dan tiempo después de dos huelgas sin precedentes en Hollywood, en la que guionistas y actores reclamaron mejores condiciones laborales y exigieron garantías de que la IA no sería utilizada de manera tal que pudiera eliminar sus empleos.
Esas manifestaciones contaron con el apoyo de los respectivos sindicatos, pero en el caso de los trabajadores de productoras de animación no hay, hasta ahora, una estructura gremial tan robusta que pueda apoyarlos.