“Hoy los argentinos empezamos a construir otra historia”. Los resultados de las Paso dejaron a Alberto Fernández a las puertas de un triunfo en primera vuelta en octubre y el candidato a presidente del Frente de Todos se mostró eufórico en el búnker en el que, casi a las doce de la noche del domingo, el kirchnerismo desató una fiesta acorde al resultado: 15 puntos de ventaja le sacaba a Mauricio Macri y llegaba al 47 por ciento de los votos, es decir en porcentajes que de sostenerse evitan el balotaje.
Pero lejos de relajarse, Fernández mantuvo el tono de campaña, que de hecho es lo que ya empezó de cara a la elección general. “La realidad es que finalmente la Argentina escuchó el mensaje. Nos importa la educación pública, nos interesa la universidad pública y queremos seguir sembrando universidades a lo largo del país. El mensaje que decía que las Pymes que invierten y dan trabajo tienen que ser respaldadas por el Estado. Que nunca creímos que la mejor forma de progresar era sacarle derechos a los que trabajan y le dijimos no a la reforma laboral”, afirmó.
El candidato del Frente de Todos agradeció también el acompañamiento de los gobernadores que se puso en acto el miércoles en Rosario. “Ellos, como sus pueblos, entendieron que en la Argentina vamos a construir un país distinto donde todos tengan posibilidad de desarrollarse en el mismo lugar que nacieron”.
“No vamos a restaurar un régimen sino a crear una nueva Argentina”, gritó Alberto, en un guiño de moderación que busca mostrar un kirchnerismo amplio, que aprendió la lección.
“En esa Argentina todos tienen lugar. La Argentina es un país donde a partir de hoy se terminó el concepto de venganza, de grieta y cualquier cosa que nos divida”, agregó.
Y chicaneó: “Yo estoy seguro de que hoy la Argentina dio un veredicto claro, que dice cambiemos en el buen sentido. Lo que Argentina se dio cuenta es que el cambio somos nosotros, no ellos”.
Además, buscó dar señales a los mercados: “Los que están intranquilos que se tranquilicen. Una vez más vamos a arreglar los problemas que otros generaron”.
Y apuntó al gobierno también por lo que pueda pasar con los indicadores económicos, aludiendo a la frase de Macri cuando pidió a sus seguidores que se vayan a dormir. “No se duerman más, durmieron mucho tiempo y nos generaron un problema enorme”.