Con 55 votos positivos, dos negativos y tres abstenciones, el Senado convirtió en ley el proyecto que modifica la fecha de las PASO y las Elecciones Generales. De este modo, se retrasan las elecciones Primarias del 8 de agosto para el 12 de septiembre y las generales del 24 de octubre al 14 de noviembre.

 

La idea de la postergación es que el país se encuentre en una mejor condición sanitaria al momento de concurrir a las urnas, frente a la segunda ola de la pandemia.

En sus fundamentos, el expediente plantea que "el aplazamiento de la celebración de los comicios a meses con temperaturas más elevadas permitirá optimizar la ventilación de los locales de votación y la implementación de los protocolos sanitarios".

La iniciativa también hace referencia a que "durante ese lapso de tiempo adicional se continuará avanzando con la masiva campaña de vacunación que lleva adelante el Estado Nacional junto a las veinticuatro jurisdicciones, coadyuvando a un mejor cuidado de la mayor cantidad posible de argentinos y argentinas que deben cumplir con su deber cívico".