Los habitantes del complejo ubicado en avenida Francia y Rioja conviven desde hace años con una invasión de decenas de murciélagos en todos sus pisos, obstruyendo el ingreso en la planta baja y los palieres, así como también en los departamentos particulares, asustando con ruido sobre todo por las noches, que salen a cazar bichos.

Cansados los vecinos de hacer reclamos a la administración para que se realice una fumigación, dieron a conocer cómo viven en diálogo con el movil de Telenoche (El Tres) en convivencia con estos quirópteros nocturnos.

En videos que registraron los propios vecinos se podía ver decenas de ejemplares volando por el palier de uno de los pisos, o apostados en un marco de ventana afuera, aun a plena luz del día. Otro video registrado por dos vecinas, se podía ver como debieron echarse en el suelo del ascensor, del cual no podían salir por la cantidad de murciélagos en el palier.

Valentina es una vecina que precisó que “es un problema de años, que se escucha en todo momento, y más por la noche porque salen a cazar. Este edificio es un palacio para ellos, y a veces se siente como si alguien golpeó una pared y es un murciélago que se chocó”.

La joven explicó que entre las paredes interna y externa “hay un nido infinito desde la planta baja en todos los pisos, y en la puerta de entrada ya los ves volando. Nos cuidamos para abrir y entrar sin que nos ataquen, sobre todo las mujeres con el pelo”.

En torno a la búsqueda de soluciones, otro vecino aseguró: “Desde la administración nos dijeron que nosotros debemos hacer la fumigación y arreglar las paredes, pero es un problema edilicio. Las paredes están separadas por un durlock que es donde están los murciélagos. Ellos deben fumigar el edificio porque si uno solo fumiga su departamento, se trasladan a los demás y no se soluciona el problema”.

Otro vecino relató una escena terrorífica: “Una noche saqué 11 de mi habitación. Llegué y saque uno, después vi en el armario, y empecé a sacar de la ventana. Se vive muy mal”.

El vecino que reside en el piso más alto destacó que “la escalera de emergencias se llena de murciélagos”, y luego destacó en torno a los hábitos que debieron ir adquiriendo: “Buscamos la forma de que estos bichitos no se nos peguen a la ropa. Es llegar a casa y controlar que no haya alguno de ellos”.