En los primeros nueve meses del año el gobierno de Santa Fe recuperó 1.200 toneladas de metales robados o de dudosa procedencia y procedió a la clausura de 49 establecimientos donde se acopiaban estos materiales o que funcionaban de forma clandestina.
Según destacaron desde el ministerio de Gobierno, a partir del inicio de la gestión Pullaro, se intensificaron los controles sobre chatarrerías, locales de venta de autopartes y desarmaderos. “Los controles están dando resultados positivos permitiendo desarticular distintos eslabones de la cadena delictiva que implica estos ilícitos, que causan daño a la población y al medio ambiente”, destacaron desde la secretaría de Gestión de Registros.
De este modo, remarcaron que en estos meses se realizaron 49 Inspecciones en la provincia, con 19 inspecciones en la ciudad de Rosario y también se trabajó en otras 17 localidades. En todos los casos, el resultado de cada operativo derivó en la clausura de cada desarmaderos y chatarrerías inspeccionada.
A su vez, indicaron que se secuestraron 32 millones de pesos y 10 mil dólares; se incautaron 700 placas de cementerios y 1.200 toneladas de materiales ferrosos y no ferrosos. Además, subrayaron que el total de los elementos compactados en ese período asciende a 700 toneladas.
Entre lo secuestrado se encontraron, placas de cementerio, crucifijos, medidores de agua y gas, picaportes y cables de electricidad y ataúdes, entre otros elementos. Como dato saliente, en Venado Tuerto, una chatarrería completa resultó decomisada por la Justicia y puesta a disposición de la Agencia Provincial de Registro, Administración y Destino de Bienes y Derechos Patrimoniales (Aprad), que se encargó de compactar todos los elementos encontrados.
Impacto en denuncias al 911
Como resultado de estas tareas de control, inspección y sanción, se evidencia un marcado descenso de los llamados a la línea 911 para denunciar este tipo de delitos. Teniendo en cuenta enero y agosto de este año como puntos de referencia, en Rosario se redujo un 76,34 % la cantidad de comunicaciones y en la ciudad de Santa Fe se registró una reducción de un 80,38% en los llamados.
Las cifras señalan, asimismo, el buen funcionamiento de los mecanismos de denuncias que ofrece la provincia a la población. Los controles se complementan además con tareas de difusión sobre el correcto funcionamiento de los comercios dedicados a estas actividades. Asimismo, tienen la finalidad de crear condiciones de seguridad jurídica en cuanto a la actividad realizada por estos comercios. Se busca así contribuir a una política del Estado tendiente a preservar la fe pública registral y el derecho de propiedad de los usuarios.