El proyecto de ley impositiva de Santa Fe para 2025 incluye un beneficio largamente esperado por el sector de transporte y el servicio de taxis, en respuesta a un pedido que, según fuentes del sector, data de más de dos décadas.
La normativa permitirá que los transportistas deduzcan parte de lo pagado en patentes del impuesto sobre los ingresos brutos, aliviando así una de las mayores cargas fiscales que enfrenta el rubro.
Para el transporte de carga y de pasajeros, la deducción será del 40%, mientras que los taxis y el transporte de leche fluida contarán con una deducción completa del 100% de lo abonado en patentes. Según fuentes del sector, esta medida busca aliviar el costo de las patentes, que en Santa Fe suelen ser significativamente más altas que en provincias vecinas, una situación que había llevado a algunas empresas a registrar sus vehículos en localidades con tasas más accesibles.
“Los taxis van a recibir un beneficio del 100% en sus patentes, al igual que el circuito de recolección de leche. Es un pedido que lleva años en la mesa y que por fin podemos responder”, comentó Pablo Olivares, el ministro de Economía provincial.
Para el sector del transporte de carga, que cuenta con un 40% de descuento, esta medida representa una alternativa a la baja directa del impuesto sobre los ingresos brutos, que beneficiaría también a empresas ajenas a la provincia. Con esta fórmula, Santa Fe asegura que el beneficio impositivo impacte exclusivamente en la actividad de transporte radicada en la provincia.
Además, esta deducción de patentes no afectará la recaudación de los municipios, ya que estos percibirán primero el pago completo del impuesto y luego se aplicará el descuento sobre ingresos brutos a nivel provincial. Esta disposición es bien vista por los intendentes, que se verán liberados de la presión histórica que imponía la alta carga impositiva a sus propios residentes en el sector del transporte.
La normativa también aclara que los servicios de transporte por aplicaciones no estarán alcanzados por estos beneficios, lo que deja fuera a plataformas como Uber, consolidando así una postura de apoyo explícito al sector de taxis y Cabify.
Como contrapartida, el que no patente el vehículo y sea detectado por el fisco tendrá una multa que se prevé el doble del impuesto.
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