La implementación del impuesto PAIS a las importaciones de bienes y servicios y la falta de reglamentación de las excepciones frenaron las operaciones. Según comentaron en dos grandes empresas, los permisos de importación de bienes y servicios, SIRA y SIRASE, estaban trabados este martes por la mañana y los bancos no tenían precio para vender divisas a aquellas empresas con permisos ya otorgados. Estas son algunas de las cuestiones que aceleraron la emisión de comunicados de la Unión Industrial Argentina (UIA), la Asociación Empresaria Argentina (AEA) el Foro de Convergencia Empresarial (FCE) y otras entidades empresarias manifestando preocupación por las restricciones que anunció el Ministerio de Economía el domingo por la noche.

"La decisión unánime fue salir con un comunicado", dijo un ejecutivo de una multinacional que participó de varias reuniones en la UIA, entre lunes y martes por la mañana. "Los anuncios de estos últimos días, que esperamos sean de carácter transitorio producto de la escasez de divisas, afectarán la actividad, con fuerte impacto en las pymes, a partir de una mayor presión fiscal al sector productivo, mayores costos y pérdida de competitividad para la exportación", indicó la entidad que preside Daniel Funes de Rioja. "Resulta fundamental evitar el sesgo antiexportador y las distorsiones de precios que generan estos esquemas que impactan aleatoriamente en las cadenas de valor", añadió.

El texto marca situaciones que se repitieron en las empresas. "No se conoce aún la normativa para saber el alcance de la excepción del Impuesto PAIS", que, según dijo el ministro de Economía, Sergio Massa, en C5N, alcanzaría a quienes fabriquen o importen "bienes de las canasta básica", además de combustibles y medicamentos. "No se ha contemplado eximir a todo lo que está en el marco del Precios Justos", se quejó la UIA.

Fuentes de la Secretaría de Comercio indicaron que siguen trabajando para definir las excepciones al impuesto, aunque no especificaron plazos. Una posibilidad es darles prioridad a quienes tengan firmados acuerdos de precios. Este martes, la AFIP reglamentó el decreto del lunes, pero no las exenciones al pago del impuesto PAIS.

Las fabricantes de electrónicos acordaron congelar los precios hasta el 15 de agosto y ahora deberán afrontar el 7,5% adicional en la importación de sus insumos. No habrá aquí excepciones, sugirieron en Gobierno.

Impuesto con efecto retroactivo

El otro punto que criticó la UIA tiene que ver con la retroactividad del impuesto para aquellos productos que ya comprometidos y entregados, pero todavía no pagados. "Rige desde el día 24/07 para las operaciones que accedan al mercado libre de cambios y lo perciben los bancos al momento del pago, en pesos, es decir que aplica sobre importaciones pautadas con anterioridad, generando costos retroactivos que no tenían cobertura cambiaria, generando un quiebre en la cadena de pagos de los sectores afectados", dijo la industria.

En esa línea, AEA sostuvo que las medidas "impactan sobre la competitividad de las exportaciones y generan costos retroactivos sobre importaciones ya pautadas". Y agregó que se el Ejecutivo crea de manera discrecional nuevos impuestos omitiendo la participación del Congreso Nacional".

El FCE apeló a un lenguaje menos diplomático -quizás, porque no tiene que negociar con el Gobierno. Consideró que las medidas forman "un nuevo bloque de cemento (que) se agrega al peso del Estado". Y que "La creación de nuevos impuestos y el aumento de los ya existentes agrega un peso adicional a la carga tributaria que agobia desde hace tiempo a las empresas y a los ciudadanos".

La Bolsa de Comercio de Córdoba (donde se desempeña como asesor el expresidente del Banco Central Guido Sandleris) sostuvo que las medidas "aumentan la presión tributaria y están muy lejos de resolver las fenomenales distorsiones de precios relativos que enfrentan quienes producen en nuestro país". Y agregó que "implican patear para adelante y agravar los problemas que enfrentará el próximo gobierno".

En despachos oficiales repiten que las empresas hicieron colchón en los últimos meses. Enfatizan que, en el primer semestre, los productos importados aumentaron 65%, según el Indec, mientras que el dólar oficial subió 45% y los paralelos, entre 43 y 44%.