Lionel Messi sacudió los cimientos del fútbol mundial al comunicarle a la directiva de Barcelona su intención de marcharse, tras dos décadas de una trayectoria impresionante. Lo hizo a través de un burofax, e inmediatamente surgió la pregunta: ¿de qué se trata? Por otro lado, el club catalán le puso precio a las piernas del astro rosarino, más allá de los 700 millones de euros de la cláusula.
El burofax, especie de carta documento, es el instrumento que Lionel Messi utilizó asesorado por sus abogados para comunicar su decisión. Es conocido como el "servicio de fax para el envío de documentos que es exclusivo de las oficinas de correos". O también el "documento legal que solo se puede gestionar a través de este servicio".
Es decir, que es un documento enviado por Leo Messi a través de un servicio postal que acredita de forma fehaciente el remitente, el destinatario y el resultado de la entrega. Además, con este método, se considera fidedigno el contenido del escrito, así como las fechas en las que se ha tramitado.
Aunque propiamente un burofax no establece esto, sí que en la mayoría de casos se propicia el inicio de acciones legales ya se convierte en una prueba ante un posible juicio posterior.
En cuanto a lo contractual, Messi tiene vínculo con el Barcelona hasta junio de 2021. El mejor futbolista del mundo podía activar una cláusula de salida, pero debía hacerlo antes del 30 de mayo pasado. El argumento de Messi y sus asesores, es que la pandemia atrasó todos los plazos.
La cláusula de rescisión del contrato de Messi es de 700 millones de euros, una cifra astronómica que solo un pequeño círculo de clubes en el mundo estaría en condiciones de pagar. Pero el desembolso de semejante cantidad de dinero, entra en conflicto con la normativa del fair play financiero que establece la FIFA. O sea que el monto fijado por al Barsa es para que Messi nunca se fuera.
De todos modos, la voluntad del jugador aquí es clave, por eso la cifra que manejan en España es de 223 millones de euros, para llevarse al mejor futbolista del planeta en la actualidad y uno de los mejores de la historia.
La representación legal de Leo entiende que está obrando en buena ley y si quisiera efectuar la cláusula, podría hacerlo. Pero en Barcelona entienden que no tiene validez eso y que tenía hasta el 30 de mayo para informar la salida. Para evitar ir a juicio, Leo propuso el burofax, arreglar un precio de salida y así que se pueda ir y que al club le ingrese dinero.
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