La empresaria alimenticia, Graciela Alabarce, asumió esta tarde como presidenta del Ente Administrador del Puerto de Rosario (Enapro), en un acto interno y protocolar, pero de alto contenido político, por la presencia del ministro de la Producción, Gustavo Puccini, quien marcó las nuevas directrices que tendrá el organismo portuario dentro de la política provincial.
Precisamente, el objetivo central del ministro es que el Enapro deje de ser, nunca mejor dicho, una suerte de “isla” sin lazos formales y permanentes con el resto de la administración provincial y sus pares de los entes portuarios de Santa Fe y Villa Constitución.
Por eso, como gesto político del nuevo rumbo, Puccini asistió a la asunción de Alabarce con todo su equipo de secretarios (agricultura y ganadería, desarrollo industrial, transporte, comercio exterior, infraestructura productiva y la secretaría general) con miras a dejar en claro los objetivos de integración entre esferas.
Y es que, sostienen en el gobierno, con un trabajo más integrado entre el Enapro y las distintas áreas del Ministerio de la Producción se puede apuntalar el mayor uso del puerto rosarino como factor de competitividad paras las economías regionales por las ventajas logísticas que ofrece para exportadores e importadores de la región.
En rigor, ese fue siempre uno de los déficits históricos de los gobiernos provinciales que dejaron bastante en soledad (para bien o mal, según el caso) a los entes portuarios.
Un ejemplo reciente. El ex gobernador Omar Perotti no solo nunca se mostró públicamente en el Enapro sino que ni siquiera participó en la presentación del plan estratégico que elaboró la ahora anterior gestión de Guillermo Miguel. Por el contrario, si se paseó varias veces por el puerto santafesino.
Y en lo que hace a los puertos públicos provinciales, Puccini busca que puedan complementar acciones de promoción y desarrollo porque en definitiva todos son puertos provinciales
El nuevo gobernador Maximiliano Pullaro, por el contrario, llega con el objetivo de que se acabe esa falta de sintonía entre los muelles santafesinos. Incluso, hay sondeos para armar una ley de puertos públicos provinciales. Pero, por lo pronto, Puccini no está pensando en darle una estructura burocrática a esos puentes y nexos, sino que busca que el estilo de gestión sea más integrado entre los entes y el gobierno.
La integración institucional de los entes provinciales, y estos con el gobierno provincial, también es una fórmula de darle respaldo al objetivo de Pullaro de que Santa Fe tenga más fortaleza en las negociaciones por el futuro de la hidrovía.
Por el lado de Alabarce, se trata de una reconocida empresaria titular de la alimenticia La Cumbre con amplia trayectoria en las entidades empresarias vinculadas al comercio exterior, y llega con total respaldo del sector empresario, por ejemplo, de la Bolsa de Comercio de Rosario. También de los gremios.
Alabarce, quien viene de ser parte del directorio, toma la conducción de un ente normalizado y saneado que además empezó un intenso proceso de presión sobre la concesionaria de las terminales I y II (Terminal Puerto de Rosario) para que se ajuste al cumplimiento de los términos de la concesión.
Y el principal tema a resolver (ahora de la gestión “conjunta” Enapro/Producción) es acordar un plan de inversiones conjuntas con el concesionario que recupere la deficitaria infraestructura del puerto, que tiene más de la mitad de su franja de muelles sin utilizar por riesgo de socavón.
Y, al tratarse este, de un tema de muy alta política, el respaldo que llegue al ente de lo más alto de la Casa Gris será fundamental para negociar desde la fortaleza un entendimiento con una empresa que tiene como socio a una firma quebrada como los es Vicentin, sin demasiado capital por invertir