Son múltiples los objetos y artículos que, junto a texturas y colores, conforman grandes opciones para implementar en la decoración. En el caso de los cuadros, además de todo ello se conjugan las formas y tamaños para saber realmente dónde ubicarlos y, si esa decisión, es la más conveniente.
Para ello, las y los expertos suelen hacer algunas recomendaciones a tener en cuenta, logrando así que el o los cuadros elegidos no desvíen la atención ni saturen el ambiente si es eso lo que se desea lograr.
En tal caso, las recomendaciones son las siguientes:
-Motivos abstractos y desdibujados: Al no tener una forma definida, no logran desviar en demasía la atención.
-Utilizar colores similares a la paleta del espacio: Es decir, combinar el cuadro con los colores que el ambiente ya posea. Esto generará que no haya saturación.
-Reforzar el estilo: Las líneas y colores pueden ayudar a reforzar el estilo del ambiente, siendo el cuadro un verdadero complemento del espacio.
