La investigación por el hallazgo de 30 kilos de cocaína ocultos en una vivienda de Puerto Gaboto en agosto de 2022 condujo, casi dos años después, al ruralista entrerriano Leonardo Roberto “Leo” Airaldi, quien fuera el titular de la disuelta Sociedad Rural (SRA) de Diamante, hoy con expedientes abiertos por narcotráfico. En las últimas horas el fiscal federal Walter Rodríguez solicitó que Airaldi, propietario de la isla del Delta conocida como El Pillo, y su empleado Diego Roberto “Pete” Torres, presten declaración indagatoria ante el Juzgado Federal de Santa Fe. Es esperar que el puestero Torres no lo haga, ya que se encuentra prófugo. Los 30 kilos de la droga estaban en una vivienda que Torres alquilaba, la cual fue allanada por un caso de amenazas sin relación alguna con un expediente narco. Para el Ministerio Público Fiscal (MPF) no hay dudas de que la mercancía perdida pertenecía a Airaldi.
Airaldi, de 41 años, se metió en problemas en julio de 2022 cuando personal de Gendarmería lo interceptó y le secuestró dos pistolas y un centenar de municiones cuando iba al mando de una Volkswagen Amarok junto con tres personas en barrio Ludueña. En la 4x4 había una importante cantidad de ansiolíticos de venta bajo receta, una escasa cantidad de droga y una balanza de precisión. Por la portación de las armas, el ganadero entrerriano estuvo preso en la cárcel de Piñero, hasta que firmó un acuerdo abreviado (tres años en suspenso) y salió en libertad a los dos meses, en septiembre de 2022. Su celular, sin embargo, quedó secuestrado.
Según pudo saber Rosario3, en ese teléfono quedaron plasmadas conversaciones un tanto implícitas sobre maniobras de tráfico de drogas con el puestero Torres, el hombre que la Policía de Gaboto buscaba en una causa por amenazas en la jornada del 10 de agosto de 2022. Torres no estaba en la casa de Solís al 600, pero cuando los agentes de la comisaría 12ª dieron vuelta el colchón de su cama, hallaron 30 panes de cocaína pura con los curiosos envoltorios de Emirates – Qatar.
Lo cierto es que incluso antes de la causa por portación de arma, la reputación de Airaldi no era buena. En la década pasada circularon todo tipo de versiones periodísticas que lo vincularon con las altas esferas narco de Paraná. Sobre todo a partir de sus menciones en el libro Territorio Narco –escrito por los periodistas Daniel Enz y José Amado– que lo vincularon con el ex intendente de Paraná Sergio Varisco y Daniel “Tavi” Celis, ambos condenados por narcotráfico en un resonante proceso judicial.
Previo a sus coqueteos con el hampa, Airaldi –señala una crónica de La Nación– apareció en la escena pública en pleno conflicto rural en 2008, después de la muerte de su padre, un reconocido dirigente agropecuario de Diamante. El joven empezó a administrar una importante fortuna, procedente de la herencia, pese a los reclamos de su madre, Mirta Balbi, también integrante de la Sociedad Rural de esa localidad entrerriana.
“Una vez concurrió con ese vehículo (un Mercedes Benz) al reclamo agropecuario en 2008, en la rotonda de acceso a la ciudad de Victoria. Los productores lo echaron del lugar, por su ostentación permanente. Cuando chocó el auto, su madre le envió una carta documento a la empresa de seguros para que no le pagaran el dinero correspondiente. Eso profundizó el distanciamiento con su madre, por lo cual incluso la justicia dispuso medidas de restricción al propio Airaldi”, cuenta el mencionado libro Territorio Narco.
El derrotero de Airaldi tras salir del penal de Piñero no tuvo aires de redención. En diciembre de 2023 quedó pegado a uno de los narcos más tristemente célebres de la Argentina.
En el verano pasado y en su ciudad de Diamante, la Policía lo frenó en una Volkswagen Amarok que tenía pedido de secuestro firmado por la jueza federal de San Martín, Alicia Vence, que investigaba a la banda del narco bonaerense Miguel Ángel Villalba, alias Mameluco, por narcotráfico, lavado de activos y hasta las muertes por carfentanilo.
Según el portal Encriptada, hasta el 2022, esa camioneta azul estuvo registrada a nombre de un socio de Villalba y con cédula azul a favor de uno de los hijos de Mameluco. Pero un año después, y a 400 kilómetros de distancia, estaba a nombre de la ex esposa de Airaldi, Tanya Kranevitter. La mujer, al menos en los papeles, aparece como la administradora de la isla El Pillo, junto con Francisco Rouillón, un socio de la Bolsa de Comercio de Rosario. La Fiscalía Federal envió un “pedido de colaboración” a esta entidad para saber si “se llevaron adelante medidas previas o sobrevinientes en materia de prevención del lavado de activos” respecto de la admisión del socio de Los Pillos SA, el ente que administra la isla.
La caída del ruralista
Ya en 2024 Airaldi cayó detenido en una investigación de Prefectura por narcotráfico y hoy está procesado por el juez federal de Paraná Leandro Ríos bajo la figura de organizador de una banda de 17 personas que tendría base de operaciones en el pintoresco pueblo de Las Cuevas, a poco más de 40 kilómetros de Victoria. Le atribuyen distribución, logística de sustancias como marihuana, ketamina –anestesiante para caballos usado como droga recreativa– y cocaína. Entre los procesados hay dos policías, uno de Santa Fe y otro de Entre Ríos. Y aunque en los allanamientos el secuestro de droga fue magro, el juez basó su resolución en la interpretación de escuchas. Según trascendió, a Airaldi lo venían investigando desde 2019. La defensa, por supuesto, apeló la causa.
Pero ahora Airaldi sumó otro frente judicial por los 30 kilos de drogas hallados en Gaboto.
Para el fiscal federal Rodríguez no hay dudas de que esa droga estaba bajo sus dominios. Y para sustentarlo presentó peritajes de teléfonos y un testimonio de identidad reservada, muy rico en detalles, entre otras evidencias. El puestero Torres, está acreditado, era uno de sus empleados de Airaldi en Los Pillos SA.