Una vez más, la escuela Nº 1.238 “Santa María Dominga Mazzarello” de Güiraldes al 500 bis, de barrio Villa Manuelita, suspendió las clases por un robo. En el caso de este lunes, es porque sustrajeron el medidor de agua y dañaron un caño. La semana pasada también tomaron la misma medida ante otro hecho de inseguridad.

Según informó la periodista Almudena Munera (De 12 a 14, El Tres), es el quinto robo que sufre la institución en menos de un mes. El 24 de mayo se llevaron ventiladores y rompieron una puerta, el 2 de junio sustrajeron ventiladores y rompieron caños para sacar las canillas, el 5 y 6 de junio robaron caños, reflectores y cables que afectaron las clases porque el edificio había quedado sin servicio de luz y agua. 

“Pudimos reponer (de los últimos dos hechos) parte del servicio para tener clases un par de días. Cuando regresamos, nos encontramos con que robaron el medidor y arrancaron parte de un caño que es el que alimenta de agua la escuela”, comentó María Gabriela, la directora de la escuela. 

La autoridad escolar aclaró que la decisión se tomó solo con el nivel primario, ya que en la parte del edificio donde funciona el secundario no se afectó el servicio de agua. “Nos llamaron desde Fiscalía para hacer un seguimiento de los robos. El barrio es víctima, la escuela no está ajena a eso”, agregó.

“Nos cuesta mucho económicamente resolverlo, por eso es tan lento todo. La escuela debe ser un ámbito para que los niños estén acá. Pedimos seguridad para la escuela, por eso vamos a adherir al paro de mañana”, concluyó.