Este viernes por la madrugada la Policía Federal secuestró poco más de una tonelada y media de cocaína de altísima calidad en Rosario, que tenía como destino final los Emiratos Árabes Unidos. Estaba escondida en alimento balanceado a base de maíz con un mecanismo "complejo y sofisticado".
En conferencia de prensa tras los allanamientos, el comisario general Mariano Giuffra, de la Superintendencia de Drogas Peligrosas, dio detalles sobre cómo estaba oculta la droga. Destacó que fue un “método muy complejo” que habrá demandado “varios días”.
Los 1.658 kilos de cocaína, continuó, estaban fraccionados en estuches con la marca francesa, mezclados entre expeller de maíz, que es un gránulo, y bañados con repelente para animales domésticos para impedir que fuera detectado por los perros rastreadores.
La cocaína fue hallada en un galpón de Génova al 2400, desde donde iba a ser despachada al puerto de Rosario rumbo a Dubai, por la Hidrovía, en “big bags”, un tipo de bolsa especial que se usa para la exploración de granos.
