Se fue el mejor jugador de la historia de Central, sin dudas. El más ganador, el capitán adentro y afuera de la cancha.

Por suerte pude hablar mucho con él en mis 35 años de profesión. La idea era siempre conocer su opinión del momento de Central en distintas etapas y la presentación de la entrevista siempre era: "Estamos con el mejor jugador de la historia de Central, si no opina él, ¿quien?". Y al instante se venía una broma del querido "Negro".

Lo enriquecedor de cada nota que le hacíamos era que opinaba sin compromiso, a veces era crítico y otras muy generoso en sus conceptos, sobre todo cuando se refería a algún juvenil que mostraba cosas interesantes para llegar a primera.

Mi relación con Omar arranca en la cobertura que hice de todos los partidos de la Copa Conmebol 1995 y en esos viajes pude conocer a un referente que era muy respetado por sus compañeros. A tal punto que la anécdota dice que todos usaban toallas chicas para bañarse y el "Negro" era el único que tenía dos toallones.

En otras charlas con los compañeros de aquel equipo de la Conmebol, siempre mencionaban el saludo de Palma cada mañana muy temprano en el grupo de Whatsapp: "Buen día campeones", escribía religiosamente. 

Siempre cordial, gracioso, apasionado, ganador por naturaleza

Comentaba que salió campeón tres veces con Central y que podría haber logrado una cuarta estrella si no se retiraba y jugaba la Copa Conmebol siguiente. Decía: "Si seguía jugando no se nos escapaba". 

Una linda anécdota que nos contó a todo equipo de Zapping Sport, en un asado que hizo en su casa de Ibarlucea, hacía referencia a cuando fueron a River con Julio Zamora, el referente de Newell's con el que tuvo mayor amistad.

Palma en su casa, con el equipo de Zapping y Petaco Carbonari

Llegaron con el representante de ambos a un banco de Capital Federal a cobrar unos premios,. Ellos se quedaron afuera esperándolo y cuando salió, la policía los estaban requisando sobre el capot del auto porque los veía "sospechosos".

En las últimas charlas que tuve por radio se lo notaba muy contento por haber vuelto a trabajar en Central, muy agradecido a la posibilidad que le dio Gonzalo Belloso de recorrer durante la semana el predio de Arroyo Seco o la Ciudad Deportiva viendo a los juveniles, pero también hablando con los jugadores actuales de primera división.

Lo vamos a extrañar mucho. Siempre cordial, gracioso, apasionado, ganador por naturaleza.
Se va el número uno de la historia canalla y una referencia futbolística de la ciudad.
Gracias por tantas charlas, los oyentes agradecidos, siempre serás el 10 de Central. Se fue una verdadera leyenda.