La cuadra entera de 3 de Febrero al 1900, donde está ubicada la capilla del Sagrado Corazón, se convirtió en una procesión de gente, que continuaba por calle Dorrego hacia Mendoza en la jornada de este martes. Sin frío que amedrente, con bufandas y capuchas, decenas de fieles esperaban desde temprano conocer en persona a la Leda, la mujer a la que se le atribuyen cambios en estados de salud y ánimo, quien a fin de junio fue retirada de la catedral de Rosario.

Personas con movilidad reducida, madres con hijos, cuidadoras con señoras mayores, grupos de hombres, así como jóvenes en reposeras parecían esperar una entrada a un recital de su artista favorito, con cita para las 19. Decenas de personas a lo largo de una cuadra y media aguardaban, con paciencia y mucho abrigo, conocer a la que algunos llaman “sanadora”, Leda Bergonzi.

En el segundo martes que la mujer y su grupo espiritual Soplo de Dios Viviente brinda sus bendiciones en el oratorio del colegio Sagrado Corazón, tras ser retirados de la basílica de Córdoba y Buenos Aires. Desde entonces, se volvió un epicentro de la fe en pleno corazón de la ciudad.

“Mucha gente me ha comentado que ella es milagrosa. Vine a las 11 de la mañana, para conocerla porque soy una persona de mucha fe, y tengo muchos motivos”, comentó la primera mujer en haber arribado, en diálogo con el móvil de Punto Medio (Radio 2).

La cola para asistir a las bendiciones de Leda Bergonzi daban vuelta la cuadra por Dorrego. (Ana Isla/Rosario3)

“Es la primera vez que venimos, a depositar la esperanza, pensamos que es la enviada de dios. Escuchamos por las noticias que ella estuvo en la Catedral. Tengo a mi marido que no está bien, y vine temprano. La fe vale mucho, aquí estamos”, agregó una segunda entrevistada.

“No sabemos mucho sobre Leda, venimos con fe desde Villa Gobernador Gálvez a conocerla”, agregaron dos mujeres más.

A las 18 las puertas de la capilla se abrieron. En el colegio unos 30 colaboradores, catequistas del Sagrado Corazón realizaban mate cocido para las personas que aguardaron tantas horas haciendo cola.

Los catequistas fueron acomodando a las personas que hacían la cola, mientras docentes, directivos y deportistas del club Atlético Sagrado Corazón se sumaron a la organización de este nuevo encuentro, para el que se espera nuevamente una capilla repleta de fieles.

Algunos de los catequistas y voluntarios que hacían mate cocido para los fieles que esperaron horas para ver a Leda. (Rosario3)