La joven venezolana que denunció haber sido víctima de abuso sexual durante una entrevista laboral en el barrio porteño de Balvanera dijo estar agradecida con Dios por no acordarse de "nada" de lo sucedido, ya que "no hubiera soportado" recordar el hecho. Además, cuestionó que el agresor permanezca en libertad mientras ella está "sufriendo mucho".

La víctima, de 18 años, habló en una entrevista para la señal televisiva internacional TVV y relató lo sucedido en el local de venta de indumentaria al que fue citada el sábado 23 de enero para una entrevista laboral. 

Sobre el momento en el que llegó al lugar, la joven dijo que le pareció "extraño" que el hombre, Humberto Garzón Martínez, le pusiera "el candado a las persianas" y cerrara "todo con llave". 



"Inmediatamente le mandé un mensaje a mi mamá diciéndole que tenía miedo porque vi que estaba cerrando todo. En ningún momento se dio cuenta de que usé el celular. Se acercó hasta donde estaba, en la caja, y me ofreció vodka", contó en el reportaje.

Ella le respondió que no tomaba alcohol y que, además, si lo hacía, tendría problemas con su madre: "Lo único que le dije es que iba a ver (de tomar) agua, pero que la iba a tomar de un filtro. Me levanté, las atendí (a las clientas), y cuando regresé tenía el agua allí".

"Estaba tan metida en el tema de que hay que hacerlo bien para quedar en el trabajo que no me percaté de que él ya me había servido el agua", explicó la víctima.

Luego de beber el agua la joven sintió que se le "dormían las manos", por lo que marcó "la última llamada" de su teléfono celular y se comunicó con su hermana.

"Cuando veo que contesta solo vi que la llamada estaba corriendo pero ya no le podía hablar, no le pude decir absolutamente nada porque sentí que me dormí", contó la chica, quien explicó que luego se sintió "mareada" y "dormida", tras lo cual vio como el hombre le "estaba poniendo el pantalón".

La joven venezolana señaló que imagina que se volvió "a dormir", porque cuando despertó "nuevamente estaba con una policía".

"La tristeza la tengo en todo momento. Sólo digo: Dios mío, gracias que no me acuerdo de nada. No hubiera soportado recordar algo"
, dijo entre lágrimas.

Respecto a la decisión de la jueza Karina Mariana Zucconi de dejar en libertad al abusador, la joven dijo que no estar "de acuerdo" y añadió que está "sufriendo mucho".

"En Argentina he visto muchísimos casos, y he oído que el abuso tiene una tasa muy alta, el femicidio y todo ese tipo de cosas. Normalmente por miedo, temor o susto (las víctimas) no dan la cara como lo estoy haciendo yo. Tengo muchísima fe de que les voy a dar fuerza a otras chicas para que den la cara, para que digan y denuncien", concluyó.