La inteligencia artificial y la formación "última milla" dominan el futuro laboral. En el marco del 60° Coloquio de IDEA en Mar del Plata, Andrea Ávila, CEO de Randstad para el Cono Sur, ofreció una visión sobre los desafíos y oportunidades del mercado laboral en la región. Destacó la leve recuperación en la creación de empleos, especialmente en empresas de consumo masivo, aunque apuntó que los desafíos de formación siguen siendo significativos.

"Lo que observamos en las últimas semanas es una pequeña recuperación de los puestos de trabajo. Esto sucede sobre todo en empresas de consumo masivo, que se preparan para un posible repunte del consumo o anticipan una reactivación más sostenida", explicó Ávila.

La ejecutiva también enfatizó que industrias como la automotriz y la energética esperan ser protagonistas del crecimiento proyectado para 2025. “Estamos viendo una recuperación que tiene que extenderse a sectores como minería, petróleo, energía eólica y la industria tecnológica, que sigue teniendo más de 5.000 puestos sin cubrir cada año”.

Ávila destacó el impacto de la automatización y la inteligencia artificial en las empresas. Sin embargo, advirtió que estas innovaciones requieren inversión y nuevas habilidades. "Aunque la incorporación de tecnología es inevitable, vemos que aún no se refleja del todo en el mercado. Las empresas necesitan trabajadores con habilidades específicas, incluso operarios que puedan adaptarse a operar máquinas cada vez más sofisticadas", señaló.

Un tema central para Ávlia es la educación secundaria y la capacitación continua en el lugar de trabajo. "La terminalidad escolar es básica; sin haber terminado la secundaria, es difícil acceder a cualquier empleo formal. Las empresas invierten en lo que llamamos formación de ‘última milla’: capacitamos a los empleados para las tareas específicas que deben realizar, pero necesitamos que lleguen con una base educativa sólida".

A medida que la automatización redefine los perfiles laborales, la CEO de Randstad resaltó que la educación y la formación técnica serán cruciales para cerrar la brecha de habilidades. Con un mercado que exige profesionales preparados, especialmente en tecnología, el desafío de las empresas es lograr que la inversión en capacitación se traduzca en crecimiento sostenible.

Con un enfoque optimista hacia el futuro, Ávila concluyó que las empresas argentinas se preparan para un nuevo ciclo de expansión en 2025, pero advirtió que la clave estará en alinear las habilidades de la fuerza laboral con las demandas del mercado: “El talento está, pero debemos formarlo y retenerlo en el país”.