La vitamina C, también conocida como "la supervitamina", es uno de los ingredientes clave en el cuidado de la piel coreano, también conocido como k-beauty. De esta forma, se logra el efecto "piel de cristal".
Obtener una piel suave, luminosa y con mucha energía es una de las máximas tendencias y el ácido ascórbico o Vitamina C es fundamental para lograrla por sus múltiples beneficios para el organismo. Además de proteger de los radicales libres y la contaminación, la vitamina C también contribuye en la unificación del tono, la estimulación de producción de colágeno y protección contra daños de rayos UV.
Cómo utilizar la vitamina C en la rutina de skincare
Para un correcto uso, se recomienda hacer una "rutina en capas". Se trata de una técnica de 10 pasos para aplicar múltiples productos, comenzando por el más ligero y continuando hacia las fórmulas más densas, y así lograr maximizar la absorción y eficacia de los distintos ingredientes.
Asimismo, existe una versión resumida que se explica a continuación:
-Limpiar y revitalizar: Utilizar un limpiador a base de aceite en un primer paso, y continuar luego con uno a base de agua para lograr el sistema de doble limpieza que garantiza la preparación correcta para colocar el resto de productos. Además, al menos dos veces al mes, sumar una exfoliación.
-Nutrir y reparar: Utilizar mascarillas intensivas de vitamina C, repitiendo una o dos veces por semana tras la limpieza. Dejar actuar al menos 20 minutos.
-Tonificar y preparar: Colocar un tónico hidratante que ayude a equilibrar el pH junto a una esencia concentrada enriquecida con múltiples principios activos.
-Hidratar profundamente: Se pueden utilizar humectantes tradicionales o sérums y ampollas con vitamina C, con al menos una concentración de entre 12% y 20% de la misma. Tras absorberse, colocar la crema hidratante indicada para el propio tipo de piel.
-Proteger: Para finalizar, colocar protector solar.
