En el marco de una investigación por narcomenudeo en el barrio 17 de Agosto, personal Antidrogas de la Policía Federal realizó tres allanamientos e incautó medio kilo de cocaína en ese sector de la zona sur lindero al Casino City Center, señalado como una especie de feudo del clan Cantero.
Uno de los puntos allanados –el único que resultó positivo para los investigadores– fue la barbería de calle 528 al 6300, local que fue visitado por el trapero Zaramay en su polémico paso por Rosario a comienzos de 2021, ocasión en que se tomó fotografías junto con Luciano Uriel “Lucho” Cantero, hijo de Claudio “Pájaro” Cantero, portando armas. Las imágenes tuvieron consecuencias judiciales.
La Fiscalía Federal Nº 2, a cargo de Claudio Kishimoto y Franco Benetti, solicitó los allanamientos ante el juez federal Carlos Vera Barros. Las medidas se materializaron ayer en tres domicilios cercanos ubicados en el núcleo de la antigua villa La Granada.
Previamente, el personal de la PFA había documentado decenas de movimientos de soldaditos, vendedores de droga y compradores en varias esquinas, sobre todo en la franja que va de las 18 a medianoche, y estableció tres posibles puntos de acopio.
En los testimonios de calle, algunos vecinos se animaron a manifestar temor a “la banda de Lucho” que en las escuchas de una de las causas que lo tiene detenido en la cárcel de Marcos Paz dijo: “El barrio es mío”.
Uno de los puntos allanados este jueves fue la barbería “Estilo propio” de calle 528 al 6300, de donde la PFA secuestró poco más de medio kilo de cocaína, entre envoltorios, medio ladrillo y trozos compactos. Para los investigadores, no hay dudas de que Lucho posee vínculos con este local.
En “Estilo propio” –donde pueden verse afiches de personajes devenidos íconos pop del mundillo narcocriminal, como el actor de la serie de Pablo Escobar o Tony Montana, el protagonista de la película Scarface–, el trapero Zaramay se tomó una serie de fotografías junto con Lucho Cantero y otros miembros de su banda, supuestamente a modo de promoción de su música y videoclips.
La producción fotográfica, sin embargo, se transformó en una causa de intimidación pública para Zaramay. Estuvo un mes detenido y en marzo de 2021 accedió a una suspensión de juicio a prueba, a cambio de una cumplir una serie de reglas de conducta y de donar dinero a una organización comunitaria.