Tres vendedores de droga que operaban en Funes quedaron en prisión preventiva este jueves tras una audiencia en la que se los acusó de regentear una boca de expendio en un domicilio de la zona norte de esa ciudad, el cual ya había sido allanado el año pasado por la Policía Federal.
Los tres imputados, de apellido Quiroga, cayeron el pasado lunes en un allanamiento de la Brigada de Microtráfico, cuyo personal secuestró una escasa cantidad de droga en un domicilio de Suipacha al 400.
Según voceros policiales, fueron apenas 10 gramos de cocaína y 5 de marihuana, que bien podrían ser de consumo personal, pero –según aseguraron las fuentes– las maniobras de comercialización estaban documentadas previamente, a lo que sumaron la presencia de una balanza de precisión y de recortes de nylon típicos de la actividad del narcomenudeo.
Además, en el domicilio secuestraron una moto Honda Wave con pedido de secuestro y guarismos adulterados, por lo que los detenidos sumaron una imputación por encubrimiento. El juez Gonzalo Fernández Bussy dejó al trío detenido por el plazo de ley, es decir, al menos dos años hasta una eventual condena.
Según la Fiscalía, el dato de la boca de expendio funense llegó a los detectives por parte de vecinos mientras realizaban tareas investigativas relativas a otro hecho.
El domicilio, según pudo averiguar Rosario3, ya había sido investigado y allanado por la Policía Federal.
El 15 de abril de 2023, en lo que se llamó el operativo llamado Viernes blanco, la casa de Suipacha al 400 fue uno de los 35 puntos allanados por los federales. En esa ocasión, en la casa incautaron 75 gramos de cocaína y otro tanto de marihuana, mientras que en Villa Gobernador Gálvez, secuestraron nada menos que 40 kilos de cocaína.
