El doctor en Psicología y escritor, Bernardo Stamateas, brindó herramientas para transitar la pandemia de coronavirus. Pero no se trata de remedios o medidas preventivas sanitarias para no contagiarse sino una serie de consejos prácticos para la mente y el corazón, donde también el virus mundial deja huellas. La clave, de acuerdo a lo que explicó, es no aislarse del otro sino todo lo contrario, acercarse y ser más solidarios que nunca. Para las parejas, recomendó respetar los espacios, de tiempo y los físicos que ofrece la casa.
“No hay que sentirse mal de sentirse mal”, advirtió en primer lugar el profesional, consultado por Cada Noche (El Tres) y ahondó: “Es normal sentirse mal, nos cambiaron el escenario, estamos con un virus que no vemos y hay incertidumbre. Entonces tener hastío, bronca, falta de motivación, problemas para dormir es normal pero el punto está qué hacemos con todas esas emociones, ¿cómo las drenamos y expresamos?”
Entonces, para el psicólogo es necesario contar con “válbulas saludables de escape, que son los espacios que tenemos que construir para expresar todas esas emociones”. En este sentido, señaló: “Lo primero es hablar, nos curamos hablando, lo que la boca no habla el cuerpo lo expresa. Hablar, llamar a alguien, no guardar las emociones. El héroe y el cobarde, los dos tienen miedo pero el héroe se anima. Acá se trata de permitirse sentir y darle dirección”.
Otra recomendación es “escribir, volver al diario íntimo, 15 minutos por día”, planteó. “¿Y qué escribo? Lo que sea. Sacálo, la mano vas más lenta que el cerebro, escribir es terapéutico”, indicó. “Tercero–continuó– ejercicio físico. Caminá y movete. Y lo lúdico. Reírnos, divertirnos. No estar 24/7 con el coronavirus porque la sobreinformación nos deforma”.
¿Y entonces qué hacemos? “Ideas prácticas: rituales familiares, horarios y pautas fijas que hacen que la ansiedad disminuya, armar un plan familiar de intercambio de roles” aconsejó y precisó: “Para las parejas, la técnica de bandoneón–destacó– estar juntos y separados de manera dinámica. Ella se va al living, vos al dormitorio, es decir, aprender a tener los espacios separados, comunes y compartidos de manera dinámica”.
“Muchas personas que estaban mal potenciaron el malestar al estar confinados y con crisis económicas, muchas parejas se separaron, hay más consultas por ansiedad y ataque de pánico y depresión. Vemos más episodios de violencia porque la angustia que no se expresa se manifiesta en agresió, admitió y sostuvo al respecto: “No tenemos que aislarnos, una mano nos puso en el pecho de nuestra madre, desde ese día hasta el ultimo necesito de esa mano, nos curamos con el otro”.
Por último, consideró que es necesario buscar el contacto, ser más solidarios, volcarnos a los demás antes de esperar que la gente nos llame o nos convoque. “La pandemia nos ha desnudado, para algunos es un momento disruptivo pero las neurociencias ya nos han enseñado que lo más valioso y lo que nos constituye como humanos son los vínculos afectivos”, terminó.