Más de 1.500 armas y unas 10.000 municiones incautadas en el marco de diferentes investigaciones penales en toda la provincia fueron enviadas para su destrucción a la Agencia Nacional de Materiales Controlados (Anmac).
El procedimiento se enmarca en el lineamiento estratégico de gestión y de persecución penal priorizado por el Ministerio Público de la Acusación (MPA) "para el abordaje de los mercados ilegales y las violencias altamente lesivas", se informó oficialmente desde el organismo santafesino.
Con esta entrega, son 3.108 las armas y 25.000 las municiones que se remitieron en total en lo que va de este año, precisaron las fuentes. Todo es recibido por el Banco Nacional de Materiales Controlados (Banmac), a partir de gestiones realizadas por la Secretaría de Gestión de la Fiscalía General, a cargo de Marina Pieretti.
La funcionaria del MPA señaló que “en 2023 fueron 2.750 las armas que remitimos y, en lo que va del año, ya superamos esa cantidad”. Al respecto, aclaró: “Tenemos la proyección de realizar una última entrega antes de fin de año, cumpliendo los lineamientos de la política de gestión de armas del MPA”.
Pieretti indicó que “el procedimiento se realizó a partir del trabajo de cooperación que el MPA viene realizando con la Anmac y el Ministerio de Seguridad de la Nación, todo en el marco de un convenio que se firmó en abril para abordar las investigaciones vinculadas con los mercados ilegales de armas de fuego y las violencias altamente lesivas”.
La Anmac será la encargada de ejecutar la destrucción. Por su parte, el operativo de traslado estuvo a cargo de personal de las Tropas de Operaciones Especiales (TOE) de la Policía de Santa Fe.
Medidas de seguridad
“La remisión de las armas se realizó cumpliendo estrictamente las normas establecidas en los protocolos del MPA, certificados por normas ISO 9001”, explicó Pieretti.
Entre otras medidas, previo a la entrega se generó un perfil de identidad de cada arma peritada y se llevaron a cabo pruebas de disparos con conservación de proyectiles y vainas testigos, todo remitido al SAIB.
Finalmente, se efectuó el etiquetado y precintado de seguridad, el traslado y la entrega con la fiscalización correspondiente.